Este domingo 29 de agosto del 2021 los ciudadanos acudieron desde las 07:30 al Centro de Convenciones Metropolitano de Quito para ser inoculados contra el covid-19.
En los exteriores del lugar se observó una corta fila de personas que ingresaba a este lugar de forma rápida. Los militares controlaban la logística y que las personas mantengan el orden.
De forma organizada, los ciudadanos esperaban en sillas. En los interiores de este sitio aguardan por sus turnos con el fin de recibir la primera dosis de Cansino y la segunda de AstraZeneca, Pfizer y Sinovac.
Las personas que recibieron las vacunas indicaron su satisfacción ya que de este modo esperan reactivar la economía del país, afectada por la pandemia.
Cecilia Gutiérrez, de 60 años, acudió para recibir la segunda dosis de AstraZeneca e indicó lo siguiente: “Me siento segura, espero que todas las personas se vacunen. Yo soy comerciante de ropa y mi anhelo es que de esta forma se active nuevamente la economía, para avanzar”.
“Soy diseñador multimedia y estar vacunado me hace sentir seguro. A veces voy a sets para realizar producciones y así voy a estar más protegido”, sostuvo Miguel Carvajal, de 29 años, que fue inoculado con la segunda dosis de AstraZeneca.
Gustavo Estévez, un hombre de 59 años, fue vacunado con la segunda dosis de Sinovac, explicó que tiene una imprenta y que ahora siente que él y su familia están protegidos.
“Ahora me siento más segura y protegida por el bienestar de mi familia”, indicó Miriam Espinoza, una mujer de 57 años, que se colocó la segunda dosis de AstraZeneca.
Otros ciudadanos se refirieron a la rapidez del proceso de vacunación. María Quiroz, de 50 años, recibió la vacuna de Cansino. “Soy empleada doméstica y ahora me siento segura con mi salud y segura de preservar mi trabajo. Además, me pareció el proceso muy rápido el día de hoy”.
“Yo vine ayer y no me pude inocular, porque no llegaba la vacuna, mientras que hoy fue el proceso muy eficaz”, señaló Esmeralda Angamarca, de 54 años de edad, quien recibió la segunda dosis de AstraZeneca.