Computadoras prehistóricas

La revista Time publicó este año que una persona revisa su celular -en promedio- 110 veces al día. En los niveles más altos llegan incluso a las 900 veces de promedio.

La cifra se ha convertido en un reto y una alerta para los medios de comunicación y los periodistas. Las audiencias empiezan a buscar contenidos desde los dispositivos móviles. Las noticias, por ejemplo, ya deben pensarse con una estructura de cómo se visualizarán en un celular. En algunos medios -incluso de América Latina- los periodistas tienen la consigna de imaginarse cómo su noticia se verá en una pantalla portátil pequeña.

Sin embargo, esa es solo la forma. En el fondo, el reto está en saber cómo estructurar el contenido para acercarlo al usuario del dispositivo móvil. La noticia es quizás la forma más fácil de hacerlo, pero ¿cómo se puede contar una historia en el ‘display’ de un iPhone, por ejemplo? Hay menos espacio para ser más creativo.

Es un reto más grande porque se cree (por muchos prejuicios) que al público de la Internet no le interesan los temas de geopolítica, economía, etc. El miércoles pasado, cuando se anunció el deshielo entre Cuba y EE.UU., pocos creían que ese tema no fue el más visto en el sitio web de EL COMERCIO. En una reflexión post mórtem, quizás fallamos en la forma de comunicar y explicar el impacto de la reanudación de las relaciones entre isleños y estadounidenses.

Resulta que al público de la plataforma digital sí le interesan temas profundos; hay que llegarles con un lenguaje más creativo, pero sobre todo en poco espacio deben estar los datos, los gráficos, las fotos, los videos... que realmente importen.

El periodismo generalista desaparecerá en el digital y en los móviles habrá contenido de detalle, de datos. El gran problema es que con toda la información en la palma de una mano, las computadoras de escritorio pronto se convertirán en dinosaurios, no así el buen periodismo.