El aumento de la esperanza de vida no solamente trae desafÃos a la sostenibilidad de los sistemas de seguridad social en el mundo. Esa nueva realidad también trae impactos en la oferta y demanda de bienes y servicios. Por ello, las empresas y las marcas también miran en perspectiva la posibilidad de planificar sus ingresos, con base en las proyecciones del crecimiento poblacional, y los gustos y preferencias del consumidor.