Hay mascotas de todos los tamaños, están esterilizados, desparasitados y listos para ser adoptados por una familia. Al menos 91 animales, entre gatos y perros, que fueron rescatados de las calles, permanecen alojados en el Centro de Rescate Integral Animal de Riobamba (CRIAR).
En la infraestructura de 1 200 metros cuadrados hay caniles, áreas de cuarentena para los recién llegados, un quirófano de esterilizaciones y dos áreas de recreación donde los perros aguardan que alguien se enamore de ellos y se los lleve a casa.
Los 40 cachorros y juveniles están en una especie de vitrina donde los visitantes que llegan a diario al Parque Ecológico de Riobamba pueden mirarlos, incluso tocarlos y jugar con ellos.
La mayoría de perros son amorosos y juguetones, se relacionan fácilmente con los niños y son los que encuentran hogares con más facilidad. Hay otros que son tímidos y se ven temerosos, sus cuidadores dicen que probablemente fueron golpeados o maltratados en las calles, por lo que requieren de más amor para recuperar la confianza en las personas.
En una vitrina también se exhiben gatos de todas las edades que fueron rescatados de las calles. Ellos están esterilizados y a la espera de un adoptante.
Guillermo Dávalos, director de CRIAR, cuenta que durante la pandemia los abandonos de animales se incrementaron. Entre el 2020 y lo que va del 2021 ya se han hecho 716 rescates.
“La gente nos contacta a través de las redes sociales o de llamadas al ECU 911. Cada día atendemos en promedio 14 casos”, dice Dávalos.
Según él, la mayoría de animales que llegan al centro tenían familias. “El abandono animal y el maltrato está sancionado hasta con tres años de cárcel, pese a eso aún hay mala tenencia de mascotas”, explica.
Una estrategia del Municipio para controlar la fauna urbana en las calles son las campañas de esterilización gratuitas. Un quirófano móvil se desplaza a los barrios y parroquias rurales cada trimestre. En lo que va del año ya se hicieron 1483 esterilizaciones.
Para adoptar una mascota los interesados deben llenar un formulario y firmar un compromiso de tenencia responsable. Durante la pandemia el Municipio abrió un servicio de adopción a domicilio, las familias interesadas pueden mirar las fotografías publicadas en las redes y contactar al centro para recibir a su nuevo integrante en casa.
La semana pasada Elena Carrera llegó hasta las instalaciones del centro para adoptar a la pequeña Cocoa, una perrita de unos nueve meses de edad que fue recogida en las calles. Elena vio su fotografía en Facebook y sintió una conexión.
“Tengo un hijo con síndrome de Asperger, las mascotas le llenan de amor y le han ayudado muchísimo. Esta es mi quinta adopción”, cuenta Carrera.