La avenida 9 de Octubre, principal arteria del centro de Guayaquil, se llenó de guayaquileños que arribaban para festejar el pase de la Selección al Mundial de Brasil 2014.
Se concentraron desde antes del inicio del cotejo contra Chile en la esquina de las calles 9 de Octubre y Boyacá, un tradicional punto de encuentro para los festejos.
Frente a un enorme televisor LCD, estratégicamente ubicado dentro de un local de venta de electrodomésticos, los transeúntes se iban aglutinando para apreciar las jugadas.
Otros prefieron concentrarse con sus amigos y compañeros de trabajo en los bares de la Zona Rosa, a pocas cuadras de allí. Los bares prepararon promociones especiales para atraer a los clientes ávidos de disfrutar el cotejo.
Aunque los ánimos se apagaron tras el segundo gol del seleccionado chileno, la algarabía se volvió a encender cuando ya quedaban pocos minutos para el final del encuentro.
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En la 9 de Octubre los aficionados que llegaron en vehículos empezaron a pitar los claxons con fuerza.
La celebración fue tomando más impulso, mientras arribaba más gente al sitio de la concentración. Marcos Jiménez, vendedor ambulante del sector, se preparó para la ocasión vistiendo una camiseta de la Selección brasileña.
Sus amigos se animaron a bailar ritmos cariocas envueltos en la bandera tricolor. Tampoco se olvidaron de agradecer a Cristian Benítez. El homenaje póstumo se reumió en el grito en coro: “¡Ole, ole, ole, Chucho, Chucho!”.
Los festejos se prolongaban hasta pasadas las 22:00 a lo largo de la avenida y en otros puntos de encuentro del Puerto Principal.
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