La semana pasada se cumplió un siglo desde que Henry Ford revolucionó el sistema de producción vehicular.
Y es que este pionero de la industria automotriz implantó la primera cadena de montaje móvil en su planta de Highland Park, en Míchigan, Estados Unidos.
Gracias a este mecanismo, este norteamericano simplificó el proceso de ensamblaje del Ford T en 84 pasos. Cada una de estas etapas estaba a cargo de un grupo de trabajadores, mientras un cable transportaba el chasís del vehículo a lo largo de la línea de producción.
El tiempo que tardaba el armado de las 3 000 piezas de este modelo se redujo de 12 horas a 90 minutos. De esta forma, Ford cumplió con su ofrecimiento de 1906. “Voy a construir un coche para el pueblo, el automóvil universal”.
Los principios de producción de este ingenioso hombre fueron: componentes de calidad, flujo de trabajo, división del trabajo y eficiencia. Según John Fleming, vicepresidente ejecutivo de fabricación global de Ford, estas premisas aún estarán vigentes.
Todas estas innovaciones permitieron que, en esos años, el precio de venta del modelo T se redujera de USD 850 a menos de 300 para el mercado estadounidense. El hecho de reducir el tiempo, dinero y mano de obra fue beneficioso para la compañía.
Este hecho marcó un hito en la historia de la movilidad, pues los autos se hicieron asequibles para muchas personas. En 1911, Ford ya se había expandido hacia Europa. La primera fábrica se levantó en Manchester, Inglaterra.
En la actualidad, la marca tiene un total de 22 instalaciones distribuidas en todo el continente. En el 2012 se fabricaron más de 1,4 millones de autos en la región; incluyendo el Ford Fiesta, el compacto más vendido allí.
Otro de los momentos históricos se registró en 1914 cuando Ford lanzó la ‘jornada de USD 5’. Se trataba de un sueldo importante para la época y que permitió a los trabajadores de la empresa adquirir los carros que fabricaban.
Para 1927 ya se habían vendido más de 15 millones de unidades en el planeta, la mitad de todos los vehículos comercializados hasta la fecha. Se estima que cada 24 segundos salía un automóvil de la cadena de producción.
Cien años después, la multinacional se propuso que el 90% de sus plantas trabaje a tres turnos para incrementar su producción en 2017. Otro de los objetivos es disminuir de 15 a 9 las plataformas que fabrican todos los modelos gracias a las nuevas tecnologías. De esta manera se conmemora el centenario de Ford en el mundo.
Fuente: elmundo.es