Mil publicaciones guardan mil historias diferentes. Cada edición de CARBURANDO se traduce en un mundo emocionante donde el sutil sentido de las palabras y la fuerza de las imágenes se mezclan con el rugido de los motores. Ya sea en la industria o en el deporte automovilísticos, la historia de esta revista ha estado ligada a la vida de las personas y de los autos que han surgido durante estas cuatro décadas de existencia.
Y quien sino Oswaldo Hernández para contar una parte de esa historia. Sí, ese argentino, porteño de nacimiento, que llegó a Ecuador en 1970 y se encontró con un país apasionado por el automovilismo y donde halló amigos y formó una familia que también comparte su amor por los autos.
Hablamos con don Oswaldo, mejor conocido como ‘Che Carburando’, y le pedimos que nos cuente algo más de ese sueño suyo que se convirtió en realidad: crear una revista especializada en autos.
Y empezamos por el nombre. “En Argentina había un programa de radio hecho por un afamado periodista amigo mío de apellido Rouco, el programa se llamaba Carburando. Esa palabra me gustó y se me quedó grabada”, nos cuenta. Con el nombre en el subconsciente y rondándole la cabeza, don Oswaldo y su esposa Mariana emprendieron el viaje que cambiaría sus vidas. Hernández llegó a Quito en 1970 y el 24 de agosto de ese año fundó junto con algunos de los que serían sus grandes amigos y compañeros la Revista Carburando.
“La idea fue de ellos. Casi todos pertenecían al desaparecido Quito Auto Club y eran corredores y grandes aficionados a las tuercas”, confiesa. Entre esos idealistas constan los nombres de Arnaldo Sambucce, Alfredo Santacruz, Kléver Chiriboga, Xavier Espinosa, Jaime Paredes, Pascal Michelet, Gustavo Castro, Felipe Cordero, Gustavo Moya, Hernán Ampudia y unos cuantos más que fueron los promotores de la primera revista especializada del Ecuador.
“La primera edición apareció el 1 de octubre de 1970, salió de la imprenta Luz de América, situada cerca del antiguo edificio del Diario EL COMERCIO, en el Centro Histórico de Quito. La publicación tenía 36 páginas y era bicolor, ya que en ese tiempo todavía no había ‘full color’. En esa imprenta hicimos tres números, uno cada mes”, afirma.
“Por esos tiempos conocí a Jaime Mantilla Anderson, primo de la señora Guadalupe Mantilla y él me propuso que imprimiera la revista con Diario EL COMERCIO. Este hecho fue trascendental para Carburando. En enero de 1971 la revista pasó a la calle Chile (donde funcionaba EL COMERCIO) y de la imprenta plana pasamos a la offset, que era lo más adelantado de la época”, asegura el ‘Che’.
Hernández cuenta que la decisión de trabajar con EL COMERCIO le dio un impulso decisivo a la joven publicación. El cambio significó pasar de una impresión bicolor a una a todo color, con el respectivo mejoramiento de la calidad de impresión y de papel, así como con el respaldo de un periódico que para ese entonces ya tenía la tecnología de punta, editorialmente hablando. Esa etapa de Carburando duró 10 años, siempre con publicaciones mensuales hasta 1981, cuando Mantilla era el director y Hernández el editor de la revista.
“En ese año, Jaime Mantilla pasó a ser gerente general de Diario EL COMERCIO y me hizo otra propuesta muy interesante. Me pidió que Carburando se convierta en un suplemento, es decir, que sea parte de la circulación del periódico. En febrero de 1981 Carburando empezó a circular con el Diario y ahí comenzó una nueva etapa”, relata don Oswaldo.
Para ese entonces y durante casi 10 años más, Carburando siguió siendo una publicación mensual, hasta que en 1990 hubo un nuevo cambio de planes y de renovación de imagen de la revista. Pasó de ser mensual a ser quincenal. Esto se explica por el crecimiento del sector automotriz y por la expansión de las actividades deportivas relacionadas con los autos.
“Al inicio de la década de los noventa las competencias automovilísticas crecieron, había más campeonatos en varias modalidades y el parque automotor también creció, especialmente en el rally. Además, las actividades industriales y comerciales, como por ejemplo la venta de autos nuevos y la entrada de más marcas al país, se incrementaron y llegaban nuevos auspiciantes. EL COMERCIO hizo un estudio de mercado y tuvo la convicción de que la revista podía ser exitosa y salir cada 15 días”, sostiene.
Efectivamente, con dos décadas ya en el corazón de los lectores y con miles de seguidores y coleccionistas que no se perdían una sola publicación, Carburando tomó el impulso para convertirse en el referente editorial y periodístico del mundo de los motores.
A ese apoyo empresarial también se sumó el hecho de que Carburando siempre estuvo en las coberturas del deporte motor nacional e incluso internacional. Más aún, las primicias más destacadas de la industria global, tales como los lanzamientos de nuevos modelos o las presentaciones de los grandes salones mundiales (Fráncfort, Detroit, París, etc.) siempre le dieron ese toque de interés e impacto periodístico al producto.
Esta interesante etapa duró cerca de una década más. Los años noventa se caracterizaron por la difusión masiva de la Revista, ya que a la par Diario EL COMERCIO crecía en todo el Ecuador y dejaba de ser un periódico exclusivamente quiteño para convertirse un diario nacional con casi 90 años de historia. En dicha década, Carburando ya había cambiado varias veces de formato, de tamaño y de papel, es decir, una evolución significativa tanto de los contenidos, las publicidades y el soporte editorial. Había conocido ya el papel cuché, que daba realce y calidad de impresión. Es notorio, entonces, que la revista siempre estuvo de la mano con las tecnologías innovadoras de impresión, fotografía, así como con la cobertura de los eventos nacionales e internacionales más trascendentales del mundo motor.
“En 1999, luego de una reunión que mantuviera el Directorio de EL COMERCIO, me propusieron la compra de Carburando. Para ese entonces la revista tenía gran éxito y muy buena aceptación entre los consumidores y crecía cada año más, tanto en publicidad como en las coberturas editoriales. Fue luego de esa reunión y al escuchar la propuesta de la Directiva del Diario que me decidí por vender Carburando en su totalidad a EL COMERCIO”, relata don Oswaldo.
Con la llegada del nuevo milenio, CARBURANDO adoptó también una nueva filosofía y pasó a formar parte de lo que ahora es Grupo EL COMERCIO, hasta llegar a esta que es nuestra edición número 1 000, en la que resaltamos a continuación lo más interesante de la industria y el deporte automovolísticos a escala nacional y mundial. Esperamos que la disfruten.