Se dice que la expresión tuvo su origen en la Guerra Civil Española, cuando un general avanzaba hacia Madrid con cuatro columnas y contestando preguntas a un periodista le dijo, que tomará la ciudad “con la quinta columna”, refiriéndose a armados complotados de la ciudad, preparados para el efecto.
Según la enciclopedia, ésta expresión se usa para significar la presencia de un elemento que conspira internamente, contra la estabilidad o seguridad del Estado. En la vida política, la conspiración es directa contra el presidente, el gobierno, o contra un partido político o un proyecto del mismo. El “Quinta Columnista” es una persona que sirve o ayuda a los intereses contrarios del grupo que pertenece, con cierta lealtad o interés económico; los hay hasta mercenarios. Terminado el último período del Presidente Correa el grupo político “Revolución Ciudadana” se dividió en “correístas” y “morenistas” con el nuevo presidente, que tuvo que gobernar con la incertidumbre de los cómplices leales a Correa. El periodismo de investigación le ayudó a liquidar políticamente, por corrupción, a altas autoridades que en mi opinión constituyeron los “Quinta Columnistas” en el gobierno de Moreno. Presidente Lasso, hay experiencia, cuídese de los “correístas”, que se dice hay “sobrevivientes” en su gobierno. Ojo con los altos y medios ejecutivos, inclusive los servidores públicos de carrera. Por cierto, entre éstos últimos estimo serán muy pocos los “quinta columnistas”. Yo conozco profesionales de la Ingeniería Civil, que desde el año 1960 (velasquismo) hasta el gobierno de Febres Cordero (año 1984) sirvieron, trabajaron, para el país, no para un partido político. Con el debido respeto, aunque usted Presidente no lo ha pedido, le recomiendo cuidarse de los “Quinta Columnistas”. Refrán: El Diablo sabe más por viejo que por Diablo”.