Dos años y medio después de que el covid-19 fuera declarado una pandemia, el director de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, señaló que su fin está cerca. Esto luego de que la semana del 5 de septiembre de 2022 se registrara la cifra más baja de contagios y de fallecidos por la enfermedad, desde marzo de 2020.
A pesar de que el escenario es favorable y “estamos en una posición ganadora”, el principal de la OMS recordó que todavía hay el riesgo de más variantes, muertes, confinamientos e incertidumbre. Para dar impulso a la “recta final”, la organización publicó seis informes de políticas que describen las acciones claves que los gobiernos deben tomar.
Entre las recomendaciones están alcanzar los objetivos de vacunación, especialmente en grupos de riesgo; la continuidad de las pruebas de coronavirus en laboratorio para controlar posibles nuevas variantes y mejoras en
los sistemas sanitarios.
Duración de una pandemia
El epidemiólogo Washington Alemán señala que dentro de la dinámica del virus, de subidas y bajadas, lo esperado era un primer anuncio de que estamos cerca del fin de la pandemia. “Esa es la historia de los virus respiratorios; lo único que no se sabía era el tiempo que iba a tomar”, dice.
El especialista menciona que al ver la historia de pandemias anteriores, incluso de siglos atrás, la duración era de tres, cuatro, incluso cinco años. En el caso del covid-19 casi han pasado tres años desde que se detectó en China. Alemán aclara que el posible fin de la pandemia no quiere decir que el virus vaya a desaparecer.
Por su comportamiento -agrega-, podría ser muy similar al de la influenza, es decir un virus estacional que lo más probable es que afecte a personas vulnerables, con un aumento considerable en ciertas regiones. Para la salubrista Catalina Yépez, en las condiciones actuales estamos más de cerca de terminar la pandemia que de regresar a un escenario crítico (2020-2021).
Lo esperado es que el virus se vuelva endémico y que su impacto no sea como al inicio, en donde los sistemas sanitarios colapsaron y el mundo se confinó.
Vacunas
Alemán y Yépez coinciden en que en este último tramo se debe insistir en la vacunación y que la población complete los esquemas con la tercera y cuarta dosis. “Ha quedado demostrado que con millones de dosis aplicadas en el mundo, los eventos adversos han sido muy puntuales, con pocas reacciones severas”, sostiene Yépez.
Para Alemán, las vacunas han sido uno de los mayores aportes en la lucha contra el covid-19 y la tercera dosis es una de las estrategias que más ha ayudado. Además, el especialista recuerda que hay que mantener la vigilancia epidemiológica para seguir analizando el virus y las nuevas variantes que puedan surgir.
Esta práctica no solo debe seguir con el covid-19, sino con toda enfermedad infecciosa. Yépez recalca que mientras haya personas susceptibles, el virus siempre encontrará un lugar donde hospedarse y con el riesgo de que surjan nuevas mutaciones e incluso más letales.