Telmo Castro, exmilitar procesado por drogas, fue asesinado en la cárcel regional de Guayaquil

La información del asesinato al excapitán del Ejército Telmo Castro fue confirmada por las autoridades de la Dirección de Rehabilitación en Guayaquil. Foto: Archivo / EL COMERCIO

La información del asesinato al excapitán del Ejército Telmo Castro fue confirmada por las autoridades de la Dirección de Rehabilitación en Guayaquil. Foto: Archivo / EL COMERCIO

La información del asesinato al excapitán del Ejército Telmo Castro fue confirmada por las autoridades de la Dirección de Rehabilitación en Guayaquil. Foto: Archivo / EL COMERCIO

El excapitán del Ejército Telmo Castro fue asesinado la mañana de este martes 3 de diciembre del 2019 en la cárcel regional de Guayaquil, en la Costa del Ecuador.

La información fue confirmada por las autoridades de la Dirección de Rehabilitación. Los primeros datos muestran que Castro fue apuñalado por otro interno.

Castro fue señalado por sus nexos con cárteles de México, especialmente con ‘El Chapo’ Guzmán.

El exoficial estaba detenido en el centro penitenciario desde que fue apresado el pasado 21 de diciembre del 2018. La aprehensión se produjo porque días antes, el 8 de diciembre, no se presentó a la Casa de Confianza de Guayaquil.

Esa era una de las medidas que debía cumplir luego de que saliera de la cárcel en agosto de 2018, tras acogerse a la prelibertad, mientras cumplía una sentencia de 13 años de cárcel.

El beneficio legal fue cuestionado por el Ministerio de Justicia y por el Consejo de la Judicatura, que anunció una investigación a la jueza que aceptó el pedido.

El pasado 15 de diciembre del 2018, este Diario accedió a un expediente en el que no solo se muestran los vínculos de Castro con los carteles del Valle (Colombia) y de Sinaloa (México), sino también aparece el nombre de un sargento primero de las Fuerzas Armadas.

En el organigrama de la red ilegal, Castro figuraba como cabecilla en el Ecuador. El sargento primero, en cambio, se desempeñaba como seguridad y era el encargado de custodiar los traslados de la cocaína.

La detención de ambos ocurrió en octubre de 2009, en Sucumbíos. Ellos llevaban un cargamento de 557 kilos de cocaína en un auto rojo que tenía sellos adulterados del Ejército.

Ese era apenas uno de los componentes de la red “más grande” de narcotráfico desmantelada en el país. Los archivos muestran además la existencia de un laboratorio de procesamiento y refinamiento de coca. Este fue destruido durante la captura de Castro.

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