Policías incurren más en 23 faltas disciplinarias
Los datos levantados por la Inspectoría de la Policía son reveladores: en solo un año 8 634 agentes (en el país operan 46 000) fueron investigados y sancionados a escala nacional por haber cometido 23 tipos de faltas disciplinarias. Allí constan, por ejemplo, negligencia y poca atención en el servicio, omitir información relacionados con delitos, no asistir a su puesto durante tres días.
Además, “afectar a la imagen institucional”, consumir alcohol o drogas en horas de trabajo, no disponer de equipo y uniforme completo, etc.
Estos datos, incluidos en el último informe de Asuntos Internos, aparecen luego de que el Comando que maneja Guayaquil, Daule y Samborondón dispusiera siete nuevas reglas “para mejorar la imagen”.
Por ejemplo, en el 2013, el policía Óscar J. fue separado porque supuestamente abandonó su puesto. Esa fue su segunda salida, pues en el 2002 ya había sido dado de baja por ese mismo caso. Pero regresó 10 años después luego de una resolución emitida por la Segunda Sala de Garantías Penales de la Corte de Justicia de Pichincha.
Otro policía que habló con este Diario también fue dado de baja por causar un accidente de tránsito en estado etílico.
Él reconoce que fue un error manejar en esas condiciones, pero pide “una segunda oportunidad”. Ahora su caso, y cerca de otros 80 similares, fueron presentados en la Comisión Interamericana de DD.HH. En ese grupo está la causa de una mujer policía que habría causado un siniestro vial en Chimborazo. “Me ocurrió un accidente como le puede pasar a cualquier persona y por eso me separaron de la institución”.
El 30 de octubre del año pasado, mientras se presentaba un programa para reducir accidentes en los que están inmersos agentes, ya se habló de “contar con personal profesional y confiable”. Además se habló de que los uniformados deben tener una “buena conducta y comportamiento durante y después de su jornada”.
El tema se volvió a mencionar dentro de las siete medidas publicadas en esta semana. Una es la prohibición del ingreso de los gendarmes a los centros de diversión nocturna (‘night clubs’). Las sanciones en estos casos variarán de acuerdo al grado de afectación a la imagen institucional.

Un hecho que causó malestar en la institución uniformada fueron las fotos que se difundieron en redes sociales. Ocurrió en el 2013 y allí se observa a cuatro agentes dentro de un centro de tolerancia junto a una trabajadora sexual. En la imagen se observaba que dos de ellos tomaban cerveza.
El ministro del Interior, José Serrano, pidió que la foto fuera investigada. “Esto es inadmisible e intolerable, serán investigados y sancionados”, escribió en su cuenta de Twitter.
Las autoridades dijeron que situaciones como las descritas “se contraponen con la gestión policial que debe ser profesional, humana, técnica y responsable”. Según el reporte de Asuntos Internos, en un año fueron sancionados 350 uniformados, quienes habrían afectado “al prestigio de la imagen institucional”.
Pero hay otros casos en los que los uniformados fueron sancionados por negligencia al realizar una captura. Un caso de este tipo lo vive un cabo policial que ingresó hace 10 años a la entidad uniformada y fue puesto a disposición por la evasión de un preso que estaba bajo su custodia. Este tipo de falta es atentatoria, según el Reglamento de Disciplina.
Otras faltas tienen que ver con no cumplir las normas internas, falta de cuidado de los bienes del Estado, violencia e indisciplina contra un superior e incluso disponer arbitrariamente el uso de armas o equipos destinados al servicio a la ciudadanía. En Asuntos Internos se confirmó que las siete medidas únicamente regirán en Guayaquil, Durán y Samborondón; las sanciones comienzan a regir el lunes.