En el país hay 404 adolescentes que están privados de libertad por distintos delitos. Muchos de ellos no tienen familia, estudio u oportunidades para reinsertarse en la sociedad cuando salen de los centros de menores infractores. Hay casos en que el Servicio de Rehabilitación (SNAI) tiene problemas para desarrollar programas que permitan a los chicos continuar con sus estudios fuera de los centros.
Por eso, el Estado se apoya de forma coordinada con fundaciones y organizaciones internacionales para realizar un seguimiento especializado de los chicos. Una de estas oenegés es Tierra de Hombres (TDH). Esta fundación originaria de Suiza lleva trabajando en el Ecuador más de 10 años. Tienen entre sus actividades un programa de Justicia Juvenil.
Verónica Pólit es la coordinadora de la fundación y cuenta que en los últimos tres años este programa ha acogido a más de 30 jóvenes. Cinco de ellos se han graduado cumpliendo sus proyectos y estudios universitarios.
Hay jóvenes que han adquirido certificaciones para levantar negocios como barberías u oficinas de marketing. También los ayudan a generar una independencia económica.
Parte de los objetivos de atención integral a los adolescentes es el apoyo psicológico. Los jóvenes que están en el programa tienen al menos dos sesiones por semana. De esta forma hay una guía integral que facilita que se integren en una sociedad activa.
Este tipo de apoyos internacionales se generan en chicos de todas las provincias del país. Los problemas más representativos se encuentran en zonas de la Costa ecuatoriana como la provincia de Guayas. La Policía ha señalado que allí existen redes delictivas que se aprovechan de los menores de edad para cometer delitos y no tener responsabilidades.
Derecho
Los niños menores de 12 años son absolutamente inimputables ante la ley. A partir de esa edad los adolescentes, cuando cometan infracciones a la ley penal, estarán sujetos a medidas socioeducativas.