Coronel Cristóbal Espinoza: ‘En la guerra del Cenepa nuestro pelotón capturó a cuatro soldados peruanos’

Fotografía tomada en 2014 en la que el Coronel Cristobal Zapata realzia un recorrido por el Cóndor Mirador. Foto: EL COMERCIO

Fotografía tomada en 2014 en la que el Coronel Cristobal Zapata realzia un recorrido por el Cóndor Mirador. Foto: EL COMERCIO

Fotografía tomada en 2014 en la que el Coronel Cristóbal Espinoza realiza un vuelo por la frontera entre Perú y Ecuador. Foto: EL COMERCIO

"En 1995 pertenecía a la Compañía de Operaciones Especiales 21 Cóndor acantonada en Patuca (Morona Santiago). Tenía tres años en esa base y mi función dentro de las operaciones militares en el valle del Cenepa fue como comandante del Cuarto pelotón de combate en la zona de Cueva de los Tayos hasta el sector de la Y, para detectar, detener y destruir a elementos de la Quinta Región Militar del Perú que se estaban infiltrando en el sector.

En esa época era el teniente. Tenía 26 años. Los últimos tres años viví en Patuca. Cuando empezó la guerra llevaba dos meses de casado y mi esposa vivía conmigo en esa zona. Ahora soy coronel y cumplo las funciones de Director del Centro de Estudios Históricos del Ejército.

Dentro de las operaciones militares que íbamos realizando como pelotón en 1995 estaba el patrullaje de la zona. Conocíamos las operaciones del sector del Valle del Cenepa, en especial Cueva de los Tayos, Twintza, Coangos y Cóndor Mirador.

Recuerdo que ingresamos en un helicóptero Super Puma al sector de Twintza el 8 de enero de 1995 a las 16:00 por orden de mi comandante Luis Hernández. Con la misión de realizar una infiltración para detectar, detener, localizar y destruir a elementos rojos (soldados peruanos).

El 9 de enero, cuando nosotros realizamos un reconocimiento de combate desde Twintza hasta un sector que se llama La Piedra, que queda tras Cueva de los Tayos, nosotros cerramos una base de seguridad, pues ya venía la noche.

Fotografía tomada en 2014 en la que el Coronel Cristóbal Espinoza realiza un recorrido por el Cóndor Mirador. Foto: EL COMERCIO

En ese momento se detectó a elementos de un pelotón de soldados peruanos del Batallón de Infantería Callao, de Perú. Esta unidad contaba con dos oficiales y dos voluntarios. Los mismos que no se dieron cuenta que ingresaron a una zona donde yo estaba dando seguridad.

Los soldados fueron detenidos ese momento respetando la carta de seguridad que estaba en vigencia; es decir, solo nos limitamos a quitarles las armas para cumplir los tratados de Ginebra. Ahí les preguntamos qué hacían en el sector. Recordemos que el 9 de enero de 1995 todavía no estallaba la Guerra, pero ya había movimientos de los dos países.

Cristóbal Espinoza, en 1995, pertenecía a la Compañía de Operaciones Especiales 21 Cóndor. Foto: Cortesía

Dentro de las pertenencias de los militares existía un croquis de los puestos en los que estaban algunas de nuestras unidades en el sector del Valle del Cenepa. Ellos nos dijeron que estaban perdidos y que estaban cazando para sobrevivir. Eso no coincidía con toda la información que habían recolectado. Ellos pertenecían a una patrulla de reconocimiento.

Esto ocasionó que el nivel de crisis aumente. Como éramos una unidad táctica que estábamos dentro de la zona informamos de inmediato a nuestro teniente coronel Luis Aguas sobre lo encontrado. Él me indicó que espere. Se tomaron al menos dos horas en decidir para que entreguemos en perfectas condiciones a los miembros del Ejército peruano en un punto de encuentro en Cueva de los Tayos.

Cristóbal Espinoza tenía 26 años cuando combatió en la guerra del Cenepa en 1995. Foto: Cortesía

Ahora, 25 años después, en mi parte académica soy investigador de historia militar y mi competencia es recuperar el patrimonio, misión memoria del Ejército ecuatoriano. También doy clases en la Academia de Guerra e institutos militares. También acabé mi maestría en educación".

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