Las autoridades del COE Metropolitano se reunieron este 22 de febrero del 2021. Foto: Patricio Terán / EL COMERCIO
Uno de los fines de semana más conflictivos en cuanto al irrespeto de las normas de bioseguridad en Quito, desde que comenzó la emergencia sanitaria, fue el del 20 y 21 de febrero de este 2021. A esa conclusión llegaron las autoridades del COE Metropolitano durante la reunión que mantuvieron en las instalaciones del ECU 911, ubicadas en el cerro Itchimbía, este lunes 22 de febreri del 2021.
Lamentaron que entre la gente existe un marcado relajamiento y que cada semana se reportan más casos de incumplimiento de las disposiciones para evitar la propagación del coronavirus.
Juan Zapata, director del ECU 911 y presidente del COE nacional, indicó que 70 pacientes de covid-19 se encuentran a la espera de una cama en las unidades de cuidados intensivos de la capital. “Es la cosecha de las incivilidades y fiestas (…) insistimos a la gente de que el virus no se ha ido”.
Daniela Valarezo, Intendenta de Pichincha, informó que se realizaron 80 operativos donde hubo nueve clausuras y 22 reuniones fueron suspendidas desde el miércoles 17 hasta el domingo 21 de febrero. Contó que las reuniones sociales en las que se consume licor son un problema permanente, principalmente en el Centro Histórico.
También en Cotocollao, Iñaquito y Calderón. El último fin de semana se registraron varios incidentes en la parroquia de Conocoto, expresó la funcionaria. De igual manera, en Píntag, Pomasqui, San Isidro del Inca y Amaguaña hubo decenas de personas aglomeradas que escaparon al notar la presencia de las autoridades.
César Díaz, secretario de Seguridad y Gobernabilidad del Municipio, rechazó la actitud de las personas que no respetan las medidas de bioseguridad. “Subió el nivel de mortalidad y ha colapsado la infraestructura sanitaria. En esas condiciones vivimos los resultados del feriado del Carnaval y el proceso electoral, es crítica la situación. Debemos tomar medidas mucho más firmes frente a la irresponsabilidad ciudadana”.
Gabriela Obando, supervisora de la Agencia Metropolitana de Control (AMC), dijo sentirse consternada por la respuesta de la gente en los operativos. “Fue la cifra más alta de contagios después de octubre, es alarmante (…) Hay muchas personas en cuidados intensivos en la ciudad y no podemos bajar los controles”.
Recordó que encontraron un evento con más de 40 personas en Solanda, en el sur de la ciudad. Estaban en estado etílico y no utilizaron tapabocas para protegerse.
Mientras las autoridades del COE se reunieron, un grupo de propietarios y empleados de bares, discotecas, karaokes y billares realizó un plantón en las afueras del ECU 911. Pidieron a las autoridades que les permitan retomar sus actividades ya que registran fuertes pérdidas económicas por la pandemia.
Díaz indicó que se ha mantenido reuniones con los representantes de eso centros de diversión nocturna. Se continuará con las mesas de trabajo, pero les explicó que los contagios se han incrementado. “Estamos conscientes de que este sector debe reactivarse, pero ahora no es el momento. Nos iremos preparando, pero cuando lleguemos a niveles y porcentajes en los que se pueda aplicar un plan piloto”.