Pasarela y festival artístico inclusivo en el Boulevard de las Naciones Unidas

Más de 100 artistas de la zona en escena, participaran con danza, teatro, música y poesía. Foto Ivonne Mantilla / El Comercio
El boulevard de las Naciones Unidas fue el escenario para que se desarrolle este sábado 13 de agosto el Festival Artístico Inclusivo “Cultura Viva”. Más de 100 artistas de atención prioritaria que se dedican a la danza, teatro, música y poesía mostraron su talento sobre la tarima.
Renata Arboleda, coordinadora de la Unidad de Inclusión Social de la Administración Zonal Eugenio Espejo, explicó que el evento tiene como objetivo fortalecer las relaciones de respeto e inclusión con las personas de atención prioritaria. “Este evento reunió́ a varios grupos artísticos de personas con discapacidad que, a través de sus habilidades, demostraron su talento y capacidad".
Diana Armijos es directora de la Fundación Cienpies; a los 19 años le detectaron osteosarcoma cáncer al hueso, producto de esta enfermedad le amputaron una pierna. El sueño de convertirse en bailarina le motivó en crear la fundación y, a través de la danza, ayudar a otras personas que se encuentran en la misma situación.
Menciona que conseguir una prótesis en el país es muy costoso, los valores varían entre los USD 3 000 y los USD 15 000. Con los eventos que realizan se recauda fondos para cubrir los costos de las prótesis y tratamiento. En la actualidad son 100 personas que pertenecen a la fundación.
Durante el evento, grupos de danza pusieron a bailar a los asistentes y también apoyaron en la feria de emprendimientos que se desarrolló en el boulevard. En este lugar se ofertaron productos elaborados por los adultos mayores y personas con discapacidad.
Jacqueline Benalcázar padece el síndrome de Turner destaca la importancia que tienen estos festivales inclusivos porque pone en evidencia estos síndromes que son considerados enfermedades raras. Menciona que, por cada 2500 mujeres vivas una padece síndrome de Turner y su tratamiento está en USD 25 mil.
Menciona que por el desconocimiento de estas enfermedades existe mucha discriminación de las personas. Sus padres han sido el motor para que Jacqueline pueda cumplir sus sueños, entre ellos es ser bailarina de danza árabe.