En la noche del jueves, 22 de diciembre de 2022, un hombre fue la víctima mortal de la delincuencia. Ocurrió en el barrio Nuevos Horizontes del Sur, cerca de la avenida Simón Bolívar, en Quito.
Un grupo de desconocidos se llevaron un auto de una de las calles residenciales. Cuando la familia salió a ver lo que sucedía a uno de ellos lo atropellaron y dejaron mal herido.
Al no recibir atención inmediata falleció en el sitio. Según los vecinos, la policía llegó luego de dos horas de alertar el hecho.
De acuerdo con Miriam Arequipa la inseguridad es “algo que ya no se puede controlar”. Se sienten “desamparados” pues en el barrio no hay una Unidad de Policía Comunitaria (UPC).
La tragedia ocurrió alrededor de las 20:00. Los moradores lamentan que desde el ECU 911 no tuvieran respuesta.
Para Gladys Aguilar, que vive en el sitio hace tres décadas, los “últimos tiempos” la situación de la violencia ha empeorado. No se sienten seguros de salir a caminar o tomar el bus.
Explica que tienen tres alarmas comunitarias cuyas tarjetas de funcionamiento fueron retiradas por las autoridades para dar mantenimiento. Hasta el momento no las devuelven y tampoco dan respuesta a su petición de cámaras de seguridad.
La falta de policías no es algo que pasa solo en ese barrio. Los vecinos aseguran que el UPC más cercano está el Barrio San Martín, a unos 15 minutos de distancia.
Mayra Tapia, vecina de la zona, denuncia que a su pedido de una unidad policial le manifestaron que debía enviar una carta al Ministerio del Interior. “Cómo puede ser esperar todo eso paraer atendidos”, reclama.
Y una tras otra llegan las anécdotas de robos. A jóvenes y adultos mayores por igual los atracan en las calles.
Finalmente, los moradores de la zona se han puesto de acuerdo en que “ladrón cogido, será quemado“. Porque están cansados de la delincuencia que no les deja vivir en paz.
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