Los bomberos hacen inspecciones en las empresas para verificar que estas cuenten con medidas de prevención. Foto: Julio Estrella / EL COMERCIO
Tener el permiso del Cuerpo de Bomberos al día puede hacer la diferencia a la hora de evitar un siniestro. Este es uno de los requisitos para obtener la Licencia Única de Actividades Económicas (LUAE), pero sobretodo garantiza que las empresas cuenten con las medidas preventivas para mitigar posibles incendios.
En las inspecciones que realizan los bomberos se revisan al menos 10 factores generales y uno específico para determinar si el establecimiento cuenta con las medidas de seguridad requeridas en la Ordenanza Metropolitana 470.
Durante las visitas anuales que realizan los uniformados se revisa el estado de las instalaciones eléctricas, los extintores, gabinetes contraincendios, vías de evacuación, entre otros.
Las medidas de seguridad varían según la actividad económica, explica Maricruz Hernández, directora de Prevención de Incendios del Cuerpo de Bomberos del Distrito Metropolitano. Los permisos se clasifican en simplificados, ordinarios y especiales. En el primero entran establecimientos como tiendas y papelerías; el segundo hace relación a restaurantes, cafeterías, heladerías, gimnasios. Y el especial es para las industrias.
En los cuatro primeros meses del 2017, el Cuerpo de Bomberos ha emitido 10 729 informes favorables y ha negado 202. Entre los factores que las empresas no se cumplen de manera recurrente están: el mal estado de las instalaciones eléctricas, la falta de mantenimiento de los sistemas contraincendios y no tener actualizado el plan de emergencia. Durante el 2016 se emitieron 41 580 informes favorables y 1 036 negativos. Estos tienen un año de vigencia.
Pero aparte están las empresas que aún no han iniciado el proceso para actualizaro u obtener el permiso de este año.
La fábrica que sufrió un incendio estructural, el lunes 24 de abril, en Itulcachi, por ejemplo, no contaba con el permiso de bomberos del 2017. Esta empresa, que se dedica al tratamiento de residuos especiales, tenía la licencia del 2016, aseguró Hernández.
Durante las tareas de sofocamiento en este sitio se encontraron desechos de pinturas, solventes, que son considerados flamables y tóxicos. Esto obligó a los casacas rojas a usar equipos especiales para evitar afectaciones en su salud. Fue un incendio considerado de magnitud, precisó Washington Arce, jefe del Distrito Valles del Cuerpo de Bomberos.
En promedio, 700 metros cuadrados de esta empresa se vieron afectados por las llamas. No hubo personal de la fábrica afectado, pero sí impactos en el ambiente. Por este motivo se emprendieron acciones para sancionar a los representantes por un posible delito ambiental. Este trámite se encuentra en manos de la Fiscalía, pero además podrían incurrir en sanciones administrativas, refirió Verónica Arias, secretaria de Ambiente.
Hasta la fecha, en Quito se ha producido solo un incendio en empresas. En el 2016 fueron cuatro, según los Bomberos.
Para evitar este tipo de siniestros se hizo un llamado a los representantes de las empresas a gestionar el permiso de bomberos a tiempo.
Según las características de los establecimientos, los representantes pueden tener hasta dos oportunidades para acceder a este documento. Si en la primera visita no se cumple con todas las medidas preventivas, se establece un plazo para hacer una nueva revisión.
En caso de ignorar las recomendaciones, los procesos pasan a la Agencia Metropolitana de Control (AMC).
Si se ejerce una actividad económica sin contar con el informe del Cuerpo de Bomberos, los representantes de las empresas pueden ser sancionados. En este caso, la Ordenanza 470 establece una multa de USD 3 750 y la clausura del establecimiento.
Para Carla Tapia, directora ejecutiva de la Asociación de Empresarios del Sur, este tipo de sanciones no resulta efectiva, porque a su criterio no se hacen controles permanentes.
Por su parte, Hernández mencionó que debería haber un cambio. “No se debería obtener el permiso para cumplir un trámite, sino más bien para proteger al personal que labora en la empresa y la inversión”.