Muertes violentas, microtráfico y prostitución generan preocupación entre los vecinos y dueños de negocios del Centro Histórico de Quito

La Policía refuerza la presencia de los uniformados en las calles del Centro Histórico de Quito, como la calle Bolívar. Foto: Vicente Costales/ EL COMERCIO

La Policía refuerza la presencia de los uniformados en las calles del Centro Histórico de Quito, como la calle Bolívar. Foto: Vicente Costales/ EL COMERCIO

La Policía refuerza la presencia de los uniformados en las calles del Centro Histórico de Quito, como la calle Bolívar. Foto: Vicente Costales/ EL COMERCIO

Comerciantes y vecinos del Centro Histórico de Quito sienten preocupación por la inseguridad que se vive en ese sector en medio de la emergencia sanitaria del covid-19. Las personas aseguran que los delitos se reportan a diario. Uno de los hechos que causó conmoción fue el asalto a un transeúnte que se produjo a las 18:40 del jueves 14 de enero del 2021 en La Marín, un populoso sector comercial.

Ocurrió en la intersección de la avenida Pichincha y la calle Antonio Almeida. En las imágenes se observa que un peatón es abordado por dos personas, quienes le agreden con puñetes y patadas. Uno le somete por la espalda mientras la víctima trata de defenderse. Al final, los ladrones le quitan las pertenencias, le arrojan al piso y huyen.

Esa zona pertenece al distrito Manuela Sáenz, que corresponde al centro de la urbe y lo integran las parroquias urbanas de San Juan, Itichimbía, La Libertad, Centro Histórico, Puengasí y Chimbacalle. Según datos de la Policía Nacional, hasta el 29 de enero del 2021, en ese distrito se reportaron 27 robos a personas y dos muertes violentas.

Un hombre murió la tarde del martes 26 de enero del 2021, en la intersección de las calles Imbabura y Mejía de El Tejar. Según la Policía, el hecho se produjo durante una gresca entre dos personas sin hogar, frente al centro comercial del ahorro Hermano Miguel.

Cuando llegaron al lugar del crimen, los agentes constataron que la víctima tenía una herida de arma blanca a la altura del pecho. El presunto agresor también sufrió un corte en el cuello por lo que fue trasladado a un centro asistencial.

Con base en las versiones de testigos que se encontraban en el lugar, la Policía indicó que ambas personas discutían antes de la pelea. Vecinos y propietarios de negocios lamentan que el Casco Colonial se haya convertido en una zona insegura. Se quejan que los delincuentes se disfrazan de vendedores ambulantes y del microtráfico de estupefacientes en los espacios públicos.

De igual forma, el 15 de enero, un hombre de 35 años fue asesinado con cuchillo en las calles Guayaquil y Manabí. Tenía heridas en el cuello; una persona sospechosa fue apresada. “Por versiones de ciudadanos que frecuentan el lugar, en días anteriores habrían tenido discusiones y amenazas por un supuesto robo”, indicó la institución uniformada.

Joffre Echeverría preside el Buró del Centro Histórico. Asegura que la semana pasada solicitó una audiencia al Concejo Metropolitano para exponer la situación de inseguridad que viven los moradores y dueños de negocios. “Los problemas sociales se incrementan con la pandemia. La gente no visita el centro porque hay trabajo sexual, venta de alcohol artesanal que genera indigencia, comercio informal que se tomó los espacios públicos, entre otros problemas”.

A su criterio, la solución es la implementación de la ordenanza para prohibir el porte de armas blancas en el espacio público que promueve el concejal Bernardo Abad, quien preside la Comisión de Seguridad del DMQ. Esta incluye sanciones y multas para quienes incumplan la disposición.

Echeverría ha identificado que las zonas más sensibles a la inseguridad son la Plaza del Teatro con la presencia del trabajo sexual y libadores, las calles Chile, 24 de Mayo, Venezuela y Rocafuerte por los robos. A esto se suma la inseguridad que se genera en los alrededores del mercado San Roque.

Amanda Tul, integrante del Frente de Defensa del Centro Histórico, señala que los dirigentes de su agrupación buscan reunirse con las autoridades policiales para solicitarles que apliquen un plan especial de seguridad que se enfoque solo en el Casco Colonial. “El objetivo es preservar el patrimonio cultural que tenemos aquí”.

Para María Augusta García, propietaria del restaurante Diosolopay, las autoridades deben trabajar por zonas e identificar a las que tienen mayores problemas. “Solamente se dan soluciones parches. No hay planes para contrarrestar los inconvenientes provocados por la venta de droga, la mendicidad o el trabajo sexual en las calles”.

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