En la calles de Quito se comercializan trajes que prometen protección contra el covid-19. Los precios varían entre los USD 10 y los USD 15. Foto: Diego Pallero/ EL COMERCIO.
Los trajes cuelgan de perchas improvisadas a lo largo de la avenida Simón Bolívar este jueves 21 de mayo del 2020 . El costo varía entre los USD 10 y 15. Los comerciantes dicen que son antiflluidos, confeccionados con tela especial y que evitan contagios por covid-19.
Luz María Quillupangui se protege la cara con un parasol mientras espera que uno de los conductores que circula por esta avenida perimetral de Quito se detenga. Actualmente dice que el negocio no es rentable. En un buen día puede vender hasta cinco unidades. Antes, en el inicio de la pandemia, vendía de 15 a 20.
50 metros al norte, Rosa Chacha también colgó en una camioneta maniquíes que lucen estos overoles. Los fabrica de manera artesanal en la casa. Ellas encontraron en la venta de estos trajes una oportunidad para generar ingresos. Ambas no están seguras de que cumplan con todas las características para impedir por completo como lo haría un traje de protección biológico que tenga certificaciones.
La venta de otros artículos de protección también se evidencia en cada esquina de la ciudad. Guantes y mascarillas de diferentes diseños se comercializan a USD 1. Otros vendedores le apostaron a las pantallas de protección y gafas para proteger ojos y boca. Esos artículos cuestan hasta USD 5.
Trajes, mascarilla, protectores faciales, guantes se venden informalmente en Quito por la emergencia sanitaria. Foto: Diego Pallero/ EL COMERCIO.
Estas ventas se han convertido en comunes. Pero también han vuelto a las calles otro tipo de productos. En un recorrido que realizó este Diario constató la venta de caramelos, chicles, frutas y verduras en distintos puntos de la ciudad.
Por ejemplo, en la entrada al Comité del Pueblo, en el norte quiteño, se comercializa hasta pollos pelados en las aceras. Los bordes de la calle Jorge Garcés están copados por productos que se comercializan de manera ilegal. Incluso se registraron enfrentamientos entre autoridades de control y vendedores cerca de las 09:30 de este jueves 21 de mayo del 2020. Los militares tuvieron que intervenir para impedir que haya desmanes en el cuartel policial que está a la entrada del barrio.
Desde diferentes instituciones se canalizan ayudas para grupos prioritarios entre los que se encuentran familias sin ingresos y comerciantes informales.
La Secretaría de Gestión Territorial del Municipio de Quito ha armado y entregado cerca de 150 000 kits alimenticios. El departamento de Comunicación de la entidad informó que se articuló la coordinación con líderes barriales, gobiernos parroquiales, fundaciones, organizaciones de apoyo humanitario, grupos de atención prioritaria, asociaciones comunitarias, entre otras, para detectar a los grupos más vulnerables.
Los comerciantes informales ofertan sus productos en las calles de Quito en medio de la emergencia sanitaria. Foto: Diego Pallero/ EL COMERCIO.
Solo en Calderón se entregaron 14 881 paquetes. Un número similar recibieron familias de Quitumbe. Aquí vive Gloria Echeverría quien se dedica a la venta de rosas en las calles. Al tener estos insumos ha podido alimentar a sus dos hijos sin necesidad de salir a trabajar.
Otra institución que se enfoca en la ayuda a las familias vulnerables es la Prefectura de Pichincha. En un comunicado, la institución señala que durante esta emergencia sanitaria hay “circunstancias más complejas” para las personas que no tienen un empleo formal o que viven de ingresos diarios.
En coordinación con los ocho cantones y 53 juntas parroquiales se ha realizado el levantamiento de una base de datos correspondiente a 8 000 personas que se encuentran en condiciones precarias. Ahí están trabajadores autónomos, trabajadoras sexuales, personas con discapacidad, adultos mayores, mujeres víctimas de violencia, personas sin techo.
Las ventas de productos como frutas, caramelos, verduras, aguas y más regresaron a las calles de Quito, pese a que persiste el semáforo rojo por la emergencia sanitaria. Foto: Diego Pallero/ EL COMERCIO.
A ellas se las entregado las Canastas Pichincha Solidarias dos veces durante la emergencia, las cuales están provistas de alimentos naturales que comprenden una dieta para cuatro personas. Al momento se han entregado 16 500 canastas en la provincia.
Julián Achig es uno de los beneficiados. Él ha evitado salir a las calles. Sin embargo, tiene deudas que debe pagar y ya se plantea acudir a La Magdalena, en el sur, para retomar sus actividades como vendedor de caramelos en los semáforos.
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