El vicepresidente Otto Sonnenholzner dijo que la construcción del puerto de Posorja era una “nueva era” portuaria en el país. Foto: Mario Faustos / EL COMERCIO
En el Puerto de Aguas Profundas de Posorja se realizó la ceremonia de recibimiento de las 13 grúas de fabricación china.
Los discursos estuvieron enfocados en destacar la inversión privada de la empresa de origen dubaití DP World que construye y que operará la moderna terminal a partir de agosto de este año, por delegación del Estado ecuatoriano.
Junto a las 3 grúas de pórtico montadas en el muelle de 400 metros de longitud se instalaron las carpas para el evento la tarde este viernes 26 de abril del 2019.
Son las tres primeras grúas de pórtico (Quay Crane) que se instalan en el muelle del Puerto de Aguas Profundas de Posorja. El 2020 llegará la cuarta. Foto: Mario Faustos / EL COMERCIO
El ministro de Obras Públicas, Jorge Aurelio Hidalgo, dijo que la construcción del puerto “marca un cambio de época” para el sector naviero del Ecuador. Añadió que es una oportunidad de desarrollo económico y que el gestor privado está cumpliendo el cronograma de plazos que garantiza la operación del puerto más moderno del país.
Según Hidalgo, “es gratificante” la llegada de las primeras grúas con un costo de USD 50 millones. Eso se incluye en la inversión de la Fase 1 del proyecto que hasta ahora suman USD 538 millones.
Han llegado las 3 grúas de pórtico (Quay crane) que funcionarán en el muelle con una capacidad de carga hasta 80 toneladas. Darán servicio a buques Neo Panamax, Post Panamax y Triole E Class. Y otras 10 RTG ( rubber tyred gantry) para movilizar contenedores en los patios. Se completarán con otra más de pórtico y cinco más RTG en los próximos meses.
El Puerto tendrá capacidad para movilizar 750 000 contenedores al año.
Jorge Velásquez, gerente de DP World Posorja, señaló que las grúas gigantescas de pórtico son las más grandes que servirán a Sudamérica. Miden 80 metros de alto y pesan 1500 toneladas.
“Con pasó firme hemos logrado avanzar gracias al trabajo y esfuerzo conjunto con nuestro socio local -El Consorcio Nobis, empleados, contratistas y entes gubernamentales”, añadió.
El público aplaudió la presencia de Isabel Noboa, presidenta de Nobis, quien estaba en la mesa principal junto al resto de funcionarios e inversionistas.
La megaestructura portuaria que se construye a 80 kilómetros de Guayaquil es una obra en constante movimiento. Desde el martes 16 de abril, cuando arribó el barco chino, la mayor atención se centró en el muelle de 400 m de longitud. Foto: Mario Faustos / EL COMERCIO
El Ministro destacó que era la oportunidad para crecer en la región, ya que puertos vecinos como Callao (Perú) están saturados.
El vicepresidente de la República, Otto Sonnenholzner, también dijo que la construcción del puerto de Posorja era una “nueva era” portuaria en el país y consolida a Guayaquil como “ciudad portuaria”. También dijo que se trata de la mayor inversión extrajera directa que recibe el país en los últimos años.
El canal de acceso tiene el mayor calado del país con 16,5 metros de profundidad, 175 metros de ancho y 21 millas náuticas. La Autoridad Portuaria de Guayaquil ( APG) ya realizó la contratación para la señalética e instalación de boyas para la navegación, que estará a cargo de Inocar, según su gerente Damián Velasco.
En la mesa principal también estaban Doménica Tabacchi, vicealcaldesa de Guayaquil; Ernst Shulze, CEO DP World Ecuador; Jasso Saif Al Shamsi, agregado de Negocios de la Embajada de los Emiratos Árabes Unidos.
Tabacchi justificó la ausencia del alcalde Jaime Nebot y leyó su carta donde recordó el anhelo de construir un puerto de aguas profundas desde 2007 y la oposición del anterior Gobierno. “Debo defender la conveniencia de la inversión extranjera, competitiva y el lucro legal”.
En el Puerto de Aguas Profundas de Posorja se realizó la ceremonia de recibimiento de las 13 grúas de fabricación china. Foto: Mario Faustos / EL COMERCIO