Ayer, a las 11:00, casi una hora después de iniciado el Informe a la Nación y al finalizar la primera parte del discurso del presidente Rafael Correa, César Rodríguez salió del Pleno. Se retiró para refrescarse y antes de regresar a la sala se negó a hacer comentarios.
“Esperemos para saber cómo rematará”, señaló el legislador que se separó de Alianza País, el 28 de julio. Durante la sesión se ubicó con la oposición, junto a los asambleístas del MPD – Pachakutik. Se sentó entre Diana Atamaint junto al socialista Álex Remache y a Jorge Escala (MPD).
A las 10:30, el periodista de Radio Visión, Diego Oquendo, abandonó el lugar, tras escuchar al Jefe de Estado citar a su par de Perú, Ollanta Humala: “La prensa sigue haciendo daño, pero ya no pone y quita presidentes”. Antes, Correa criticó a los medios y los culpó de la inmolación de Eloy Alfaro en la hoguera…
Lourdes Tibán (MPD – Pachakutik) esperó 20 minutos más y también salió, preguntándole a Correa a gritos: “¿Quién ordenó el ataque del 30-S en el Hospital de la Policía?”. Algunos invitados la abuchearon. Ella dijo sentirse irritada de escuchar casi una hora de insultos en contra de los medios de comunicación. Y lo llamó“sicario de lengua”, en relación al adjetivo de “sicarios de tinta”, que usa en sus enlaces sabatinos.
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Junto a Tibán salió Fernando González, el primero de los seis legisladores, alejados del oficialismo. Fue expulsado pero hoy es buscado para sumar votos a favor de los candidatos a la Vicepresidencia. En la zona de los grupos no afines al Gobierno se ubicaron también María Paula Romo (ex A. País), entre Paco Moncayo (A. Libertad) y César Montúfar (Concertación Nacional). Cerca estuvo Washington Cruz (ex oficialista). En la primera fila aparecieron Irina Cabezas, Rolando Panchana; Ivonne Baki, jefa negociadora del proyecto Yasuní-ITT; Virgilio Hernández y Tania Arias, delegada del Legislativo al Consejo de la Judicatura…
El Informe a la Nación lo leyeron, a través de un telepronter, Correa y sus ocho ministros. Esto lo criticó, en un comunicado Enrique Herrería (ex M. de Guerrero). Dijo que se violó el art. 120 de la Constitución que establece que solo el Presidente debe rendir cuentas de su labor al Legislativo. En los pasillos del Pleno, Dalo Bucaram (PRE), criticó que Correa “manejará la Justicia para intentar cogerse un Diario”, en referencia a la querella contra El Universo.
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Con Diego Ordóñez, Jorge León y Guillermo Navarro.
El vicepresidente de la República, Lenín Moreno, consiguió que gobiernistas y opositores se pusieran de pie para aplaudirlo. Luego de que se proyectara un video sobre la Misión Manuela Espejo, que encabeza, recordó que la discapacidad es una circunstancia. Pero no se salió del guión y bromista se refirió a los medios: “Qué bueno es dar buenas noticias. Por favor, que lo publique la prensa”. Correa sonrió.
Pasadas las 12:30, Correa habló 30 minutos más: “¿Quién ordenó disparar? Que esa asambleísta (en referencia a Tibán) le pregunte a su hermano (Marco, aún detenido), cuando ofendía a ciudadanos, a sus propios colegas asambleístas…”. Siguió recordando a las víctimas del 30-S; agradeció la labor del GIR, GAO, GEO…
Comparó ese suceso con la hoguera bárbara de Alfaro. Advirtió que si en la Asamblea se hiciera imposible la gobernabilidad, no temería “irse a la casa”. Escala le gritó: “puro chantaje. ¿Trajiste el decreto de muerte cruzada?”.
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