El recurso de apelación al hábeas corpus obtenido por el exvicepresidente, Jorge Glas, gira sobre dos motivos. En primer lugar, se argumenta que el juez Javier Moscoso no era competente para esta causa y, otro, que era “improcedente” porque Glas cumplía dos sentencias condenatorias.
El ministro de Gobierno, Francisco Jiménez, divulgó el oficio remitido este domingo 10 de abril del 2022 por la directora de asesoría Jurídica del Servicio Nacional de Atención Integral a Privados de la Libertad (Snai), Lorena Merizalde, hacia Javier Moscoso, el juez de la parroquia de Manglaralto (Santa Elena), tras el fallo emitido la noche de ayer.
“Al encontrarme dentro del término legal previsto para la interposición del presente recurso, solicito que el expediente sea remitido al Tribunal competente para conocer y resolver sobre el presente recurso de apelación, sin perjuicio de reservarme el derecho de añadir argumentos adicionales una vez que se reciba la sentencia escrita debidamente”, indica.
En el texto de cuatro páginas se argumenta que el juez Moscoso “no es competente, en función del territorio, para conocer y resolver la presente acción constitucional”, pues emitió esta providencia desde una jurisdicción distinta a donde Glas se encontraba recluido.
Subraya que “es de conocimiento público que el ciudadano Jorge David Glas Espinel, a la presente fecha se encuentra recluido en el centro de privación de la libertad Cotopaxi N° 1 y, el hoy accionante, no ha demostrado en ningún momento estar recluido en otro centro distinto”.
El texto se hizo público minutos después de que el vicepresidente recobrara su libertad. Las boletas de excarcelación llegaron al Snai antes de que la sentencia fuese notificada por escrito.
Jurisdicción
Para sustentar este recurso de apelación, se invoca a la sentencia N° 002-18-PJO-C de la Corte Constitucional y al artículo 44 de la Ley Orgánica de Garantías Jurisdiccionales y Control Constitucional, donde se estipula que la acción de hábeas corpus “Puede ser interpuesta ante cualquier juez del lugar donde se presuma está privada de libertad la persona”.
“Cuando se desconozca el lugar de privación de la libertad, se podrá presentar la acción ante el juez del domicilio del accionante. Cuando la orden de privación de la libertad haya sido dispuesta en un proceso penal, la acción se interpondrá ante la Corte Provincial de Justicia”, continúa el articulado.
Condenas en firme
En segundo lugar, Snai recuerda que contra Glas “pesan dos sentencias condenatorias ejecutoriadas por haber sido encontrado culpable del cometimiento de los delitos de asociación ilícita y soborno, por lo que la Acción de hábeas corpus deviene de improcedente, debiendo identificarse la orden de detención que deja sin efecto, lo cual no ha ocurrido”.
Asimismo, alude a que “la decisión no considera ni motiva el por qué referirse a beneficios de prelibertad bajo la legislación que se encontraba vigente con anterioridad” al Código Penal.
Glas cumplía en la cárcel de Latacunga una condena de 8 años de cárcel por los casos Odebrecht y Sobornos. Pero recobró su libertad al cabo de 4 años y 7 meses. Su defensa argumentó que ya había cumplido el 60% de la condena y que su integridad física y sicológica estaba en riesgo, un semblante que no lo mostró al dejar la cárcel esta mañana.
Debate de juristas
Juan Pablo Albán, experto en Derechos Humanos y exoficial de la CIDH, consideró que lo actuado por el juez “es por decir lo menos extraño”, pues dijo que “es público y notorio” dónde estaba recluido Glas, por lo que el juez competente es el de Latacunga.
Juan Vizueta, exdirector general del Consejo de la Judicatura, cuestionó la celeridad en el procedimiento. “Cuando se gira una boleta de libertad del común de los mortales un día viernes, el privado de libertad debe esperar hasta el lunes, pero cuando se trata de alguien que desfalcó varios millones de dólares, el gobierno le da todas las facilidades para que salga en domingo”.
Sin embargo, el también jurista Ramiro Aguilar defendió la decisión del juez. “En casos como ese, donde era un rehén del Estado, es absolutamente válido buscar un juez en cualquier lugar de la República que lo conceda”, tuiteó.