Ecuador figura entre los países con mayor percepción de corrupción durante el 2015, en el reciente informe de la ONG Transparencia Internacional. El país se ubicó junto con Argentina en el puesto 107 de un total de 167, en el llamado Índice de Percepción de Corrupción, en que se evalúa a cada país con una escala de cero a 100.
El país estuvo en el 2013 en la posición 102, un año después, en 2014, empeoró al caer al puesto 110, por lo que el año anterior logró mejorar tres puestos con un puntaje de 32 sobre 100.
Este ‘ranking‘, liderado por Dinamarca, Finlandia, Suecia, Nueva Zelanda y Holanda, como los menos corruptos, recoge una visión panorámica sobre el nivel de la corrupción, en función de la percepción de los ciudadanos de cada nación, especialistas y colectivos consultados por organizaciones internacionales, como el Banco Mundial.
Estos países que se encuentran en las primeras posiciones de la lista se caracterizan por tener altos niveles de libertad de prensa, acceso a información sobre presupuestos, lo cual permite al público saber de dónde procede el dinero y a qué se destina. Así también cuentan con altos niveles de integridad entre los funcionarios públicos y el poder judicial es independiente de otros sectores del gobierno.
La organización Transparencia Internacional elaboró el listado de los países con mayor percepción de corrupción. Foto: Captura de pantalla
Si solo se toma en cuenta a los países de Latinoamérica, Uruguay y Chile se mantienen desde el 2014 como los menos corruptos. De los 18 países que se registran en el listado del 2015, 12 mejoraron sus posiciones, entre 3 y 14 puestos, incluido el Ecuador. El país peor calificado es Venezuela.
El vicepresidente del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social CPCCS, Edwin Jarrín, tildó al informe de “empírico y subjetivo”. A través de un comunicado, el consejero cuestionó la “debilidad en la parte metodológica del informe, ya que, según consta en el documento, el índice de percepción de la corrupción es principalmente una evaluación de la percepción de la corrupción administrativa y política, no es un veredicto sobre los niveles de corrupción de naciones enteras o las sociedades o de sus políticos en actividades”.
Edwin Jarrín ha ocupado cargos, anteriormente, como secretario de Transparencia de Gestión del actual régimen, subsecretario general del Despacho Presidencial y también se desempeñó como viceministro de Gobierno de Rafael Correa.
Jarrín criticó a la herramienta de medición, pues manifiesta que el informe tiene “encuestas de preguntas abiertas, con cuyas respuestas se realiza una transformación matemática para establecer un índice que no tiene ningún precepto metodológico”.
Otro de los aspectos que considera erróneo es la definición de los términos, según el país. Para Jarrín, “lo que se define legalmente o se persigue como corrupción difiere según la jurisdicción; por ejemplo, una donación pública puede ser legal en unas jurisdicciones, pero ilegal en otras”.
Al respecto, el consejero indicó que “emprenderán varias acciones interinstitucionales para establecer un Índice Nacional de Transparencia con solvencia académica y rigidez metodológica”.
Guatemala, Brasil, Perú y Chile son los países que descendieron en el listado, en el último año. La caída del expresidente, Otto Pérez, por el caso de defraudación aduanera, influyó en la calificación de Guatemala, mientras que en Brasil se debió al escándalo de corrupción de Petrobras, que provocó protestas ciudadanas en el 2015.
En un comunicado, José Ugaz, presidente de Transparencia Internacional, enfatizó que este Índice muestra “claramente que este fenómeno sigue asolando al mundo. No obstante, 2015 también fue un año en el cual las personas nuevamente salieron a las calles para protestar contra la corrupción. A nivel global, el público envió un mensaje contundente a quienes están en el poder: es el momento de hacer frente a la gran corrupción”.
Los resultados completos del informe puede descargarlos en: https://www.transparency.org/cpi2015