Varios de los nuevos funcionarios del gabinete de Lenín Moreno han tenido experiencia en el sector privado. Foto: Archivo / EL COMERCIO
El frente económico del nuevo Gobierno tiene un fuerte componente de profesionales que provienen del sector privado, lo que podría significar un giro en la relación con el empresariado que ha sido tensa en los diez últimos años.
Luego de que Rafael Correa tuviera entre sus filas a funcionarios que, en su mayoría, eran académicos con estudios en el extranjero y con experiencia en el sector público, el actual Gobierno se inclina por autoridades con experiencia en el sector empresarial.
Hay escasas excepciones; una de ellas es Carlos de la Torre, quien asume desde este 24 de mayo del 2017 el Ministerio de Finanzas. Hasta la semana pasada este economista se desempeñaba como director del Instituto de Investigaciones Económicas de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador. Además de su experiencia académica, De la Torre se desempeñó en varios cargos técnicos en el Banco Central o parte de los económicos que participaron en la creación del Banco del Sur y del Sistema Unitario de Compensación Regional (Sucre).
Pero otros como Eva García Fabre, quien ocupará el Ministerio de Industrias, tiene experiencia en el sector privado. Fue llamada por Moreno para que sea uno de los puentes con el sector productivo con el que ha trabajado desde los años 90 hasta la fecha. Desde el 2013 era asesora del Consejo Directivo del IESS en representación del sector empleador.
Algunos de los empresarios que estarán en el flamante Gabinete estuvieron con él desde la primera vuelta electoral. Pablo Campana, promotor del colectivo Proponle, organizó encuentros con empresarios para consensuar agendas productivas. El 11 de abril estuvo en la mesa principal con el presidente electo Lenín Moreno, en lo que fue la primera reunión con más de 400 empresarios en Guayaquil. Ahí se mencionó que el nuevo Régimen tendrá consejos consultivos y tributarios con participación del sector privado.
El extenista profesional, nacido en Quito, actualmente es presidente de la promotora inmobiliaria Millenium Partner Corporation y será el ministro de Comercio Exterior.
En el campo turístico desde hace 15 días ya se mencionaba que el nuevo ministro sería Enrique Ponce de León, director general de Decameron Ecuador. Esta es una cadena hotelera que tiene inversiones en proyectos turísticos desde el 2006 como en
Mompiche (Esmeraldas) y Punta Centinela (Santa Elena).
Carlos Pérez, el nuevo ministro de Hidrocarburos, tiene una experiencia de más de 33 años en la empresa de servicios petroleros Halliburton. Laboró en la firma hasta 2015.
El nuevo ministro de Trabajo, Raúl Clemente Ledesma Huerta, fue candidato al Parlamento Andino por Centro Democrático, que dirige el prefecto del Guayas Jimmy Jairala, que en la segunda vuelta le dio su respaldo a Moreno.
Es experto en Derecho Administrativo y Turístico, además licenciado en Ciencias Sociales y administrador de empresas y miembro del Estudio Jurídico Ledesma & Ledesma de Guayaquil.
Desde las cámaras de empresarios hay buenas expectativas sobre los nombres que actualmente conformarán el flamante gabinete de Lenín Moreno. Por ejemplo, para Patricio Alarcón, presidente de la Cámara de Comercio de Quito (CCQ), nombres como Eva García o Pablo Campana dan buenas señales al empresariado. Ellos han trabajado en la empresa privada y conocen las necesidades del sector, dijo.
Pero más importante que los nombres será ver la disposición de los funcionarios al diálogo, según Daniel Legarda, presidente de la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor). En esa misma línea, Richard Martínez, titular del Comité Empresarial Ecuatoriano, dijo que más allá de los nombres es necesario que se actúe en función del país para generar confianza.