Cuatro desacuerdos minan la unidad del sector indígena

Fabian Maisanche / el comercio Leonidas Iza (centro), líder indígena, anunció la nueva movilización.

El movimiento indígena hizo una nueva convocatoria para participar en una manifestación del martes 20 de enero en contra del Gobierno. El punto de concentración será Latacunga, en Cotopaxi.
Tienen cinco demandas: el aumento del precio de la leche, la mejora del acceso al agua para cultivo, renegociación de deudas y respeto al transporte y a la educación comunitaria, dice Cecilia Velasque, subcoordinadora de Pachakutik.
Pero el movimiento tiene tres focos de fricción que minan la unidad del sector en provincias como Chimborazo o Guayas.
El principal de la Ecuarunari, Carlos Pérez Guartambel, dijo que a él no lo han invitado a la concentración. Su agrupación ya había tomado distancia de Pachakutik cuando la mayoría de dirigentes cerraron filas alrededor de la candidatura presidencial de Paco Moncayo.
Carlos Pérez Guartambel esperaba que su nombre pueda ser considerado para ser presidenciable de la tendencia de centro-izquierda. “Lo que decidió Ecuarunari es dejar en libertad a sus bases para apoyar a cualquier candidato, con la única recomendación que no apoyen a ninguno que se identifique con el extractivismo”, aclaró Pérez Guartambel, quien tiene un enclave político importante en Azuay.
Para Velasque, la posición de su compañero, que también es parte del consejo político de Pachakutik, es respetable. Pero dijo que la agrupación política ya tomó una decisión. “Vamos a apoyar al binomio de Moncayo y Bustamante. Todos los adherentes”.
Pachakutik también enfrenta un escenario complicado en Chimborazo. Un grupo de militantes apoya al movimiento oficialista Alianza País (AP), mientras que otro se sumó a la decisión de la directiva nacional de respaldar a Moncayo.
El conflicto entre ambos se avivó en noviembre del 2016, cuando el director provincial del movimiento, Rafael Lucero, anunció el fin de la alianza política e indicó que Pachakutik Chimborazo acatará las disposiciones de la dirigencia nacional y no de AP.
Horas después, el prefecto Mariano Curicama convocó a otra rueda de prensa donde señaló que Lucero sería destituido de su cargo en el partido y que la convergencia con AP seguiría.
Pachakutik inscribió a sus candidatos para asambleístas provinciales en alianza con el oficialismo. Y fueron apeladas por la dirigencia nacional ante el Tribunal Contencioso Electoral (TCE).
En Guayas, en cambio, Pachakutik presentó dos listas para asambleístas. La primera fue de quienes se identifican como la directiva provincial de la organización política y la otra por Marlon Santi, coordinador nacional del movimiento. La delegación electoral resolvió no calificar a ninguna de las listas. El caso está en el TCE.
En otros sectores indígenas también hay puntos de divergencia. Por ejemplo, el Consejo de Pueblos y Organizaciones Indígenas Evangélicas del Ecuador (Feine) firmó, la semana anterior, un acuerdo con el candidato presidencial Guillermo Lasso, de Creo.
Para el experto en temas indígenas Ariruma Kowi, el Gobierno actual ha buscado dividir al movimiento. Advirtió que los candidatos buscan su apoyo porque saben que los pueblos originarios están en territorios donde hay recursos naturales. “Para poder explotarlos necesitan consultar previamente a los pueblos. Ahí está la importancia de tenerlos separados”, razonó.