Paez dijo que el 10 de abril iniciará, a las 06:00, un paro de transportistas, sin especificar en qué ciudad o de qué gremio. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO
La manifestación en las afueras del Consejo Nacional Electoral (CNE), en Quito, se mantiene el 9 de abril de 2017, ocho días después. Andrés Páez, vicepresidenciable de Creo-SUMA, sigue a la cabeza, en la tarima.
El candidato hizo un anuncio. Dijo que mañana, lunes 10 de abril, será un día “clave” para la protesta en contra de los resultados electorales, que dan como ganador al oficialista Lenín Moreno, y a favor del reconteo voto a voto.
Entre los detalles que dio están la marcha en Quito, que saldrá alrededor de las 18:00, desde la Cruz del Papa, pasando por la Plaza Argentina, rumbo al Centro Histórico. A esa misma hora habrá protestas en varias capitales de provincia, anunció.
Asimismo dijo que mañana iniciará, a las 06:00, un paro de transportistas, sin especificar en qué ciudad o de qué gremio.
Agregó que el Frente Unitario de Trabajadores también se unirá a esta medida y que la Federación Médica Ecuatoriana se reunirá para analizar acciones de respaldo a las manifestaciones.
El Colegio de Abogados de Pichincha también se hizo presente el domingo. Gonzalo Realpe, director del organismo, habló desde la tarima, afuera del CNE, y anunció que respaldarán a todos los manifestantes en caso de que alguno sea procesado durante las protestas. Ofreció defensa gratuita para aquellos que pudieran ser perseguidos por manifestarse.
Un representante del Colegio de Médicos indicó que ellos apoyan la manifestación con un puesto de ayuda médica, ubicado a un costado de la tarima.
En el lugar de la protesta se ha montado ya un punto de acopio de víveres y alimentos, así como vituallas, que sirven para satisfacer las necesidades de las personas que siguen llegando desde otras provincias y que están acampando en esas mismas aceras.
La protesta contó con antorchas y velas encendidas para respaldar la vigilia por la democracia, como la llaman los manifestantes, que no son solo simpatizantes de Creo, ya que la mayoría sostienen consignas y banderas no partidistas.