Usar un disfraz popular, a propósito del Halloween, es una tradición que no pasa por alto en Ecuador. Entre las opciones de este 2021 están los personajes de la famosa serie surcoreana El Juego del Calamar. ¿Es una opción para los niños?
Salomé y Antonella, las dos hijas de Alexandra Espinosa, tienen 15 y 10 años, respectivamente. Se saben la serie de memoria y le pidieron a su mamá un disfraz para usar el 31 de octubre. Además quieren una chaqueta que tiene estampada la famosa máscara de los guardias de la serie. La vieron en un centro comercial del norte de Quito
La madre de familia contó que Salomé prefiere la máscara con la figura del cuadrado. “Ella dice que significa que tiene más poder”. Pero le preocupa si está bien que sus hijas sepan tanto sobre la serie. Mientras la vieron, la madre alcanzó a observar escenas con violencia.
Dos especialistas recomiendan no vincular a los niños con la serie
Para los niños y adolescentes es difícil separar lo que es ficción de la realidad, explica la psicóloga infantil, Belén Lascano. Por ello, señala que los padres deberán identificar hasta qué punto la serie puede influir en sus hijos de forma negativa y, de acuerdo con eso, evitar el uso de disfraces relacionados con ella.
“Lo mismo pasó con La Casa de Papel. Muchos niños se disfrazaron solo porque escuchaban que la serie era famosa pero no entendían el contexto. Es importante hablarlo, explicar el papel que cumplen los personajes, no se puede tapar la violencia pero sí se puede evitarla”.
Al igual que esta especialista, la psicóloga infantil Camila Pozo señala que es preferible que los niños ni siquiera vean El Juego del Calamar, que de hecho no es para menores de 16 años. Sobre todo si el niño se desenvuelve en un entorno violento o agresivo, la serie podría generar actitudes de ese tipo en ellos, dice Pozo.
Si los niños insisten en verla es importante no dar detalles sobre lo que pasa en la serie, dice la psicóloga. Recomienda decirles, con palabras adecuadas a su edad, que no es apto para ellos y complementar con frases como “nos podemos asustar”, “puede darte miedo o preocupación”. Adicionalmente, sugiere proponer otra actividad, serie o película para generar expectativa y motivación con respecto a otro tema.
Si ya lo vieron -“porque es difícil que no lo hagan con redes sociales, Internet y con la asistencia presencial a clases que los pone en contacto con otros compañeros”- es clave el rol de la familia, dice Pozo. Si los padres ven que están imitando los juegos de forma violenta, recomienda no asustar a los chicos y juzgarlos de golpe. Deben acercarse y preguntar ¿qué estás jugando?, ¿de qué se trata?
Y luego la psicóloga sugiere explicarles que las consecuencias son lastimar a otras personas. Esto también puede ir acompañado de proponer otro juego. “No hay que prohibir porque genera más curiosidad en los niños por hacerlo”. Lo que se busca es desarrollar una habilidad social y que entiendan que no deben hacerlo porque tiene una consecuencia y puede generar algún tipo de daño y no porque mamá lo prohíbe.
Niños imitaron Luz Verde, Luz Roja en una escuela
En Bélgica, las autoridades de una escuela enviaron un comunicado a los padres de familia para informar que los chicos estaban imitando uno de los famosos juegos de la serie, denominado Luz Verde, Luz Roja.
En El Juego del Calamar el castigo para los perdedores es la muerte, así que los estudiantes decidieron golpear a quienes no cumplan el reto. Este hecho mantiene en alerta a la comunidad educativa, informaron medios internacionales.
La búsqueda de disfraces de El Juego del Calamar es de las más populares en Internet, previo al Halloween, según una publicación de CNN. También los retos relacionados con la serie son populares en Tik Tok.