El sábado se votó el informe para primer debate en la Comisión de lo Económico. Foto: Paúl Rivas / EL COMERCIO
Las utilidades en las empresas, en general, registraron una baja entre 2015 y este año.
Un informe de la consultora Andean Ecuador revela que las utilidades repartidas cayeron 18%. En el caso de las empresas “top”, es decir, aquellas que tienen las utilidades más altas, la caída fue del 61% tomando en cuenta el monto máximo entregado, según el estudio.
La situación económica que enfrentó el país el año pasado, por la caída del precio del petróleo y la apreciación del dólar, generó estos resultados en cuanto a ganancias.
Este escenario adverso se mantiene este año y se complica más por la contracción, de al menos 3% del Productos Interno Bruto, a causa del sismo del 16 de abril pasado.
Para palear los efectos de este desastre, y en medio de la compleja coyuntura, el Ejecutivo remitió el 22 de abril pasado el proyecto de Ley Solidaria y de Corresponsabilidad por las Afectaciones del Terremoto. El artículo seis determina un aporte de las utilidades de las empresas, personas y fideicomisos.
En el caso de las sociedades que hacen actividades económicas, la contribución a pagar es del 3% de las utilidades, que se calculará teniendo como referencia la base imponible el ejercicio fiscal 2015.
Las 10 empresas que con mayores utilidades el año pasado se dedican a la producción de cemento, cervezas y alimentos, además de otras que operan en los sectores de comercio y agroindustria, según datos de la Superintendencia de Compañías.
Carlos Licto, abogado tributarista, explicó que para determinar la base imponible sobre la cual tributarán las sociedades se tiene que hacer un proceso denominado conciliación tributaria. La diferencia entre gastos e ingresos arroja la utilidad contable y no el rubro sobre el cual se calcula el aporte del 3%.
Para Virgilio Hernández, presidente de la Comisión de Régimen Económico, donde se tramita el proyecto de ley, el pago corresponde a una contribución que hay que pagar para atender las afectaciones económicas que generó el terremoto.
El Servicio de Rentas Internas (SRI) espera recaudar con esta contribución, que no se aplicará en las provincias afectadas, un total de USD 160 millones.
El asambleísta Ramiro Aguilar no tiene reparos a esta propuesta, aunque no comparte otras iniciativas que contempla el proyecto como el incremento de dos puntos porcentuales al IVA.
Para gremios empresariales como la Cámara de Comercio de Quito (CCQ) no es funcional la aplicación de más impuestos. Patricio Alarcón, titular de esta entidad, indicó que la medida no generará la recaudación esperada, tomando en cuenta la situación económica de las compañías en el país.
El menor dinamismo de la economía golpeó las ventas de empresas de la construcción, importadoras, productoras de software, ensambladoras y otras industrias.
Según el empresario cuencano, Henry Aguilar, este tipo de medidas afectan aún más las finanzas de las empresas, que en este año afrontan una contracción de sus ventas. Él tiene una importadora de teléfonos móviles y una ensambladora de celulares.
Esta última no generó utilidades por las complicaciones que tiene el sector, pero la primera sí tuvo excedentes que ya se repartieron.
Los accionistas de la importadora decidieron reinvertirlos en el negocio, manifestó Aguilar. Por ello, dijo que al no tener a mano esos recursos se compromete la liquidez de la empresa. Espera que el SRI brinde facilidades para cancelar el aporte y que se otorgue un plazo de seis a 12 meses. Calcula que deberá aportar cerca de USD 30 000, “pero no es exacto hasta que se apruebe la ley”.
Para el presidente del Grupo Colineal, Roberto Maldonado, pese a la situación económica del sector industrial se tiene que aportar para los afectados por el sismo. Señaló que el año pasado su empresa generó utilidades y para poder cubrir el monto a pagar deberá recurrir al financiamiento bancario.
Andrés Tapia, miembro del Grupo empresarial Ortiz, aún no ha analizado el impacto que tendría esta medida y tampoco sabe el monto que debería aportar. Lo hará luego que la ley sea aprobada por la Asamblea. Dijo que las empresas del grupo generaron utilidades y que acatarán lo que se disponga.
Existen sectores con mayor caída de utilidades que otros como es el caso de las de industrias, servicios y comercio, según el mismo estudio de Andean. Además, el 50% de las firmas que hasta el año pasado formaban parte del “top” ya no constan.
La contribución también tendrán que pagar las personas naturales. Para ello no se tomará en cuenta las rentas que reciban por su sueldo, en el caso que laboren bajo relación de dependencia.
Licto explicó que solo pagarán si la base imponible supera los USD 12 000. Se tomarán en cuenta solo las rentas que reciban por otros ingresos como un negocio, servicios profesionales o lo que le genere dinero en un banco.