Ciudadanos de Esmeraldas pidieron el cierre de la planta, según el Gobierno. El ministro Carlos Pérez impulsa el mejoramiento del complejo. Foto: Archivo EL COMERCIO
Dentro del Gobierno se manejan dos visiones sobre el futuro de la Refinería de Esmeraldas, producto de recientes quejas sobre los problemas de ineficiencia y contaminación que muestra la planta.
El consejero presidencial Santiago Cuesta asegura que es posible cerrar una parte de la planta, específicamente la de refinación, mientras se concreta la concesión y se construye una nueva refinería con inversión extranjera. El funcionario hizo estas declaraciones el jueves, en Esmeraldas, acompañado de los gerentes de Petroecuador y de la Empresa Coordinadora de Empresas Públicas y del Secretario de la Presidencia.
En la rueda de prensa no estuvo el ministro rector de la política energética, Carlos Pérez, quien ayer emitió un comunicado para aclarar el plan para la planta, que es: concesionar la administración para que un privado invierta y mejore las condiciones técnicas y ambientales del complejo.
El funcionario no es partícipe del cierre, aunque admite que lo hará si una autoridad le obliga. En ese caso, habrá que importar derivados.
El punto en común entre ambos funcionarios es que no se darán despidos masivos de trabajadores en la Refinería.
Carlos Pérez, ministro de Energía: “La posición del Ministerio es concesionar y mejorar la planta”
“Cierro la refinería o la mejoro para no causar daño ambiental o de salud a la ciudadanía. Yo prefiero mejorar”, señala Carlos Pérez. Foto: Archivo EL COMRERCIO
¿Por qué no estuvo en la rueda de prensa con Santiago Cuesta?
Tenía cosas pendientes en Quito con el Presidente. Hoy saqué unas declaraciones aclarando la situación de la refinería como ente rector. El señor Cuesta es el consejero presidencial, pero no es el vocero oficial en este sector.
¿Cuál mismo es el plan para la Refinería Esmeraldas?
Hay que trabajar en mejorar la condición técnica de la planta en dos aspectos: emisiones al ambiente y calidad de combustibles. Para ello vamos a licitar la concesión de la administración de la Refinería. La empresa que gane el concurso invertirá capital a su riesgo para entregar combustibles bajo norma Euro 5. No es privatización. Los trabajadores tienen garantizado su puesto, no habrá despidos masivos.
¿Por qué se habla de cierre?
Hay pedidos de la ciudadanía desde hace semanas para cerrar la planta. Si nos obligan a cerrar, lo vamos a hacer, pero no es que queremos cerrarla, ya que nuestro principal afán es buscar la forma de ponerla a punto. Hay dos maneras: cierro la refinería o mejoro la refinería para no causar ese daño a la ciudadanía. Yo prefiero mejorar.
¿Quién puede obligarle a cerrar?
El Ministerio de Trabajo, si llega a considerar que las normas de salud no están bajo estándar o si corre riesgo la salud de los trabajadores. Ese Ministerio decidió inspeccionar la Refinería de La Libertad y se prevé un informe para la próxima semana. Esto es parte de los análisis que se están haciendo. El Ministerio del Ambiente también lo podría hacer, si es que no se cumplen estándares.
¿Hay procesos en marcha o por qué se habla de eventual cierre?
Se habla de eventual cierre porque la comunidad de Esmeraldas se quejó hace pocas semanas de un olor que se atribuía a la Refinería, que parcialmente fue cierto porque estábamos arrancando luego de la paralización y hasta que se estabilice había olores. Pero también hay otros temas, como el botadero o el río que afectan; es decir, hay varios aspectos que molestaban a la ciudadanía y la Refinería era uno.
¿Qué pasaría con el abastecimiento de derivados si se cierra?
Tocaría importar.
Cuesta habló ayer de cerrar una parte de la planta (refinación) y lo hizo a nombre del Gobierno.
Son procesos distintos. Una cosa es la concesión en donde pueden participar empresas privadas. Otra cosa es la construcción de una nueva Refinería. Hay interés de inversionistas en poner una nueva planta. Sabemos que hay una firma mexicana que habló con la Alcaldía de Esmeraldas para ver si hay terrenos, y lo puede hacer si lo desea. Para eso no se requiere concurso, pero las firmas sí deben ser calificadas por el Gobierno para garantizar que tienen experiencia, solvencia y que cumplan con los estándares ambientales.
¿Cuánto se necesita para poner a punto la Refinería Esmeraldas?
En el Gobierno anterior hubo una oferta del Gobierno japonés para mejorar la planta por USD 700 millones, es un valor referencial de hace un par de años atrás, no sé por qué no se tomó en cuenta, pero la estamos analizando.
¿Y el Estado cuánto recibiría a cambio de la concesión?
Petroecuador está por iniciar la valoración de este y todos sus activos. En la Refinería se invirtieron USD 2 300 millones, pero estamos conscientes de que hubo un sobreprecio. Por eso es necesario que se valore el activo para ver si, en esas condiciones, cuesta realmente eso.
¿Cuándo se licitará?
Esperamos tener listos los términos de referencia en seis semanas.
Santiago Cuesta, consejero Presidencial:“La decisión que hay que tomar es si cerramos o no la refinería”
“La Refinería de Esmeraldas está produciendo veneno y está afectando a los esmeraldeños y los ecuatorianos”, asegura Santiago Cuesta. Foto: Archivo EL COMERCIO
¿Quién está a cargo de la concesión de la Refinería Esmeraldas? ¿Usted o el Ministro de Energía?
Yo respondo como asesor del Presidente a un problema medioambiental. La decisión que tiene que tomar el Gobierno Nacional es si cerramos o no la Refinería Esmeraldas, que está produciendo veneno y está afectando a los ecuatorianos. Quien es responsable de hacer la convocatoria a licitación es el Ministerio de Energía, con Petroecuador. El Ministerio menciona en un comunicado que va a convocar a una licitación para la concesión de la Refinería de Esmeraldas y aclara que hay varias empresas interesadas en hacer una nueva refinería, que funcione sin crudo ecuatoriano.
¿Sería un cierre o concesión?
Primero viene lo uno y luego lo otro. Todo el mundo grita que se va a cerrar la refinería, que se está negociado. Ese no es el problema, (el problema) es la salud de los ecuatorianos. Si mañana llamamos a una concesión probablemente nos tardemos un año o año y medio en firmar el contrato de concesión. ¿Hasta que se haga la concesión mantenemos la refinería abierta? Lo que yo estoy haciendo, como parte del gobierno del presidente Moreno, es decirle (a la gente): señores, tenemos un activo que produce veneno, ¿usted quiere que siga funcionando o no?
El ministro Pérez dice que se debería concesionar toda la Refinería. ¿Cuál sería el plan?
Lo han mal interpretado. El problema es que se confunde Refinería Esmeraldas con la planta de refinación, que es una parte del complejo industrial. El Ministro habla el mismo idioma que yo, él se refiere a la planta de refinación, la que refina crudo y lo convierte en gasolina. Solo esa parte se concesionará, de acuerdo con lo que quiere el ministro Pérez. Es una decisión del Ministerio de Energía, no de la Consejería de la Presidencia.
¿Cuántas empresas han presentado propuestas?
Una empresa mexicana ha ofertado para poner una refinería que no contamine, con nueva tecnología. Esmeraldas tendría una inversión extranjera de USD 6 000 millones, que debería subir el producto interno bruto de Ecuador en seis puntos. Hay ofertas de Shell, de British Petroleum. El ministro Carlos Pérez me habló de 20 empresas que quieren venir al Ecuador. Hoy el país es atractivo para los mercados de capital porque en Esmeraldas tendrían, de acuerdo con la Ley de Fomento, 16 o 17 años de exención de impuesto a la renta. Por supuesto que es rentable venir a procesar crudo a Ecuador.
¿Se elegirían por concurso?
Son dos cosas distintas. Una cosa es una inversión privada en una refinería, sin crudo ecuatoriano obligatorio; otra cosa es una refinería dentro de las instalaciones de Petroecuador. La refinería que tenemos nosotros, la propia, debe ser cambiada por una nueva, que no produzca contaminación. Para esa planta de refinación debe venir una inversión privada que nos garantice que va a sacar (gasolina) Euro 5. Esa sí sería a través de una licitación. ¿Las otras refinerías? No hay necesidad de licitación.
¿Cuántas personas trabajan en la planta de refinación?
280 personas. No se va a despedir a ninguna. Seguirán trabajando en el área de remediación ambiental.
El BID estaba participando en la monetización de activos del Estado. ¿Participará en la licitación?
Esto no es monetización de activos, es un plan de salud. No tienen nada que ver el BID, la CAF ni el Banco Mundial. Es un problema sanitario. ¿Por qué se pide que mantengamos una refinería que envenena a los ecuatorianos?