Los reclamos en contra de este proyecto minero empezaron el 6 de mayo por parte de los integrantes de la agrupación denominada Pueblo del Sur de Molleturo y los hechos de violencia ocurrieron la noche del martes.
Foto: Xavier Caivinagua para EL COMERCIO
Los cuatro detenidos por los enfrentamientos registrados la noche del martes, 8 de mayo de 2018, en el proyecto minero Río Blanco, en Azuay, tienen prisión preventiva. Ese dictamen se adoptó la noche del miércoles en las audiencias de formulación de cargos.
Uno de los detenidos será investigado por aparente ataque y resistencia. Se presume que hirió con una piedra a un policía, que está incapacitado durante 10 días.
En cambio, los otros tres son indagados por supuesto sabotaje. Al parecer provocaron la quema de una parte del campamento del proyecto Río Blanco, ubicado entre las parroquias cuencanas de Molletura y Chaucha. Una parte de la zona de los dormitorios de los trabajadores y la enfermería fueron destruidas por el fuego. Una volqueta, una retroexcavadora y una motocicleta también fueron afectadas.
Fueron dos audiencias, que culminaron pasadas las 10:30 del 9 de mayo. La instrucción fiscal durará 30 días. Durante este tiempo, la Fiscalía tendrá para recoger elementos de cargo y descargo.
Los reclamos en contra de este proyecto minero empezaron el 6 de mayo por parte de los integrantes de la agrupación denominada Pueblo del Sur de Molleturo y los hechos de violencia ocurrieron la noche del martes.