La primera ministra noruega, Erna Solberg, ofreció disculpas a las mujeres de su país que mantuvieron relaciones con soldados alemanes por las discriminaciones. Foto: EFE
Noruega pidió el miércoles, 17 de octubre del 2018 disculpas oficiales a las noruegas que mantuvieron relaciones con soldados alemanes durante la ocupación y fueron blanco de represalias tras la derrota nazi.
Entre 30 000 y 50 000 noruegas, comúnmente llamadas “mujeres alemanas” , mantuvieron relaciones íntimas con soldados alemanes durante la guerra, según una estimación del centro noruego de estudios sobre el Holocausto y las minorías religiosas.
Además de escarmientos públicos como tener que ir rapadas, estas mujeres sufrieron represalias por parte de las autoridades de la Liberación: arrestos sin fundamento legal, internamientos sin juicio, despidos, expulsiones y privación –inconstitucional — de nacionalidad.
“En el período que siguió a la Liberación, muchas chicas y mujeres noruegas que habían tenido una relación con soldados alemanes o eran sospechosas (de ello) fueron víctimas de un trato indigno”, dijo la primera ministra noruega, Erna Solberg, durante un acto para conmemorar el 70º aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
“Hoy, en nombre del gobierno quiero pedir disculpas”, afirmó.
Estas disculpas, que tienen lugar 73 años después del final de la Segunda Guerra Mundial cuando muy pocas de esas mujeres siguen vivas, no dan derecho a ningún tipo de compensación económica a las familias afectadas.
Durante la guerra, más de 300 000 militares alemanes ocuparon Noruega, país neutro pero invadido por los nazis el 9 de abril de 1940.
“No podemos decir que las mujeres que tuvieron relaciones personales con los alemanes participaron en el esfuerzo de guerra alemán. Su crimen fue haber violado reglas no escritas y normas morales”, señaló la historiadora Guri Hjeltnes, qui dirige el centro noruego de estudios sobre el Holocausto y las minorías religiosas.
“Fueron sin embargo castigadas de una forma mucho más severa que los que sacaron provecho de la guerra”, recalcó.
Ninguno de los 28 noruegos que se casaron con alemanas durante la guerra fue expulsado ni privado de su nacionalidad, precisó la historiadora.
En 2000, Oslo pidió perdón a entre 10 000 y 12 000 niños nacidos de madres noruegas y soldados alemanes, que también sufrieron discriminaciones.