El Gobierno alemán exigió hoy a Volkswagen (VW) “informaciones sostenibles” que permitan estudiar posibles manipulaciones en el mercado local de los valores de emisiones de algunos de los vehículos del grupo automovilístico alemán para cumplir con la normativa, como ha ocurrido en Estados Unidos.
En la habitual rueda de prensa de los lunes, el portavoz del Ministerio de Medioambiente rechazó evaluar el tema hasta que la situación quede esclarecida, para lo cual pidió la colaboración del fabricante alemán con las autoridades estadounidenses.
Agregó que su ministerio no tiene conocimiento sobre “posibles trampas adicionales” cometidas por el grupo alemán.
Por su parte, el portavoz del Ejecutivo, Steffen Seibert, rechazó comentar el caso.
A la pregunta de si este escándalo afecta a la imagen de Alemania en sus compromisos en la lucha contra el cambio climático, el portavoz subrayó que la política climática del Gobierno alemán “habla por si sola”.
Recordó que Alemania es uno de los “impulsores” para lograr un acuerdo vinculante en la lucha contra el cambio climático en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de diciembre próximo en París.
En tanto, el jefe del Gobierno del estado federado de Baja Sajonia y miembro del Consejo de Supervisión de Volkswagen, Stephan Weil, subrayó que “una manipulación de las pruebas de emisión es totalmente inaceptable e injustificable”.
“Respetar las normas legales debe ser una exigencia evidente del consorcio VW”, declaró Weil, quien admitió que ha recibido “con preocupación” la noticia sobre la manipulación de software en relación con las pruebas de emisiones de algunos vehículos del fabricante alemán para cumplir con la normativa estadounidense en esa materia.
Agregó que las acusaciones presentadas por las autoridades estadounidenses “pesan mucho”, al tiempo que dio por hecho que el caso “será esclarecido con rapidez y en profundidad”.
“Sólo entonces puede tomarse una decisión sobre posibles consecuencias”, agrego.