“El mayor problema del Ecuador es la pobreza”. Dijo al empezar el segundo encuentro nacional de la empresa privada María Gloria Alarcón, máxima representante del sector. El 60% de los ecuatorianos no cuenta con un empleo formal. En el primer trimestre de este año se han perdido cien mil empleos.
Por eso los empresarios se han propuesto convocar a un diálogo y la concertación nacional. Como destacó la presidenta del CEL, la apertura a la inversión, el aliento a la libre empresa y las alianzas entre el sector privado, los trabajadores, la sociedad civil y el Gobierno son el único camino para que los 200 mil jóvenes que salen anualmente al mercado laboral encuentren respuesta.
Bajo ese norte se entregan las propuestas que aquí recogemos, para enfrentar la crisis mundial con pragmatismo, para reducir sus impactos negativos y fomentar la inversión privada generadora de empleo productivo.
Hay que tomar en cuenta que en el Ecuador, según las estadísticas oficiales, el 43,7% de los empleos se generan en el sector privado. Para eso la libertad de empresa es fundamental.
El papel del Estado es importante en el ámbito regulador y de control de las leyes vigentes para que una empresa privada seria, eficiente y que cumpla su papel con calidad, en un ámbito de libre competencia, genere empleo. Para que eso ocurra hace falta estabilidad jurídica que facilite la inversión privada, hay que desterrar la desconfianza y construir una atmósfera que genere respeto al sistema judicial y, por supuesto, independencia entre los poderes del Estado.
Los empresarios proponen defender la dolarización que ha permitido disminuir la pobreza de 64,7% en 2000 a 36,6% en 2007 y ha generado estabilidad.
Además, según el documento se debe limitar el gasto público, optimizar recursos, fomentar la inversión, especialmente en las áreas petrolera y minera y además, robustecer el sistema financiero.
Hay que crecer el comercio exterior que crea empleo, tornar a nuestros productos más competitivos e insertar al Ecuador en la economía global, diversificar las exportaciones, promover acuerdos comerciales con los países, especialmente con el principal socio comercial del Ecuador: EE.UU. yEuropa.
Aumentar el número de empleos de calidad, asegurar una jubilación adecuada a los trabajadores, mejorar el sistema de remuneraciones, fomentar la competitividad del esquema laboral.
Nada será posible sin una agenda de acuerdos mínimos de toda la sociedad. Es imprescindible el diálogo para construir relaciones sólidas y armoniosas.
Es lamentable que el 60% de la Población Económicamente Activa se mantenga al margen del Seguro Social, que la tasa de desempleo a marzo de 2009 sea de 8,6% y el subempleo el 51,9%. Esto dibuja un mapa social de efectos negativos para millones de ecuatorianos.