Militares de la Brigada Patria y agentes metropolitanos realizan controles en Guamaní. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO
Desacato a la autoridad e indisciplina social son problemas que han enfrentado en los últimos ocho días Fuerzas Armadas, Policía Nacional, agentes metropolitanos e Intendencia, que se ha desplegado a las siete parroquias de Quito con más contagios de covid-19.
El 17 de julio el COE nacional dispuso que se intensifiquen los operativos de control en Chillogallo, Guamaní, Belisario Quevedo, Calderón, La Magdalena, Cotocollao y Centro Histórico. De los 12 157 casos positivos que se registraron hasta el pasado viernes 24 de julio de 2020 en Quito, 5 209 se concentran en esas zonas.
Una actitud hostil y agresiva han presentado varios ciudadanos en contra de las autoridades mientras realizan los controles. Ayer, el general Fausto Salinas, comandante del Distrito, indicó que en los recorridos se ha evidenciado que mucha gente no cumple restricciones como el distanciamiento.
Otros problemas comunes son el consumo de licor y las reuniones sociales. En los ocho días de operativos más de 2 000 libadores fueron retirados de las calles. Salinas reconoce que la indisciplina social ha aumentado y son necesarias nuevas acciones para evitar que el virus se expanda.
Durante esta semana la Fuerza Pública, junto a agentes municipales y AMT, ha realizado 2 510 operativos. Según datos del Ministerio de Gobierno, 477 personas fueron multadas por violar el toque de queda, se detuvo a nueve por cometer delitos, a cinco por contravenciones y se decomisaron 15 armas blancas y 118,6 litros de licor. Además, se intervinieron 275 locales, se suspendieron 27 eventos y se clausuraron 15.
En la Argelia (sur) un grupo de agentes intervino esta semana en una fiesta con 40 personas. Según la Intendencia, la gente los insultó y les arrojó objetos de forma agresiva.
Otros policías fueron agredidos al intervenir en una reunión social en Belisario Quevedo. La Intendencia indica que la mayor parte de reuniones sociales son en el sur.
Fabio Vélez, jefe de Seguridad y Riesgos del distrito Manuela Sáenz, dice que las agresiones contra los agentes metropolitanos son frecuentes. “No hay conciencia de la gente, no entiende la gravedad del asunto. Los insultan y reciben golpes”. Señala que algunas personas no entienden que cometen doble falta al ser agresivos y salir a la calle sin protección. Vélez cuenta que en Buenos Aires (oriente) personas en estado etílico trataron de golpear a militares, policías y municipales.
El comisario de Calderón, Santiago Chipantasig, asegura que los policías y metropolitanos son los que más sufren la violencia de la gente.
500 personas atendidas
Una de las estrategias para detectar casos de covid-19 en los barrios más críticos de Quito ha sido la instalación de 10 estaciones de salud. Desde el miércoles ahí prestan sus servicios médicos del Municipio local y de Guayaquil.
Ayer, decenas de personas acudieron en busca de atención en las carpas habilitadas en la Unidad Educativa Quitumbe (sur) y en el coliseo deportivo de Calderón (norte).
En Calderón la labor empezó a las 07:00. Andrea Toala, médica guayaquileña, dijo que hasta el mediodía se atendió a ocho personas que llegaron con síntomas respiratorios leves”.
Martha Gordón, responsable de las brigadas del Municipio de Quito, indicó que desde el miércoles hasta ayer, cinco de las 10 carpas atendieron. En el resto se trabaja en su instalación y se prevé que desde el lunes 27 funcionen todas.
Entre el miércoles y jueves, en Quitumbe, la Unidad Educativa Julio Moreno, San Diego, Escuela Sucre y Calderón se atendieron a cerca de 500 personas. Quitumbe y Calderón fueron los sitios con mayor demanda, según Gordón.
En una primera evaluación, la Secretaría de Salud señaló que el 90% de los pacientes atendidos tienen síntomas respiratorios leves o son asintomáticos. Otro 6% presentó síntomas moderados y fue referido al Centro de Atención Temporal Bicentenario (CAT).
Personas con sintomatología de covid-19 esperan por atención médica en Quitumbe. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO
El resto, informó Gordón, fueron casos en los que ameritó una transferencia urgente a un hospital porque presentaron síntomas graves.
Uno de los inconvenientes que ha detectado esta entidad es que las personas se acercan a solventar dudas en las carpas, lo cual implica un riesgo. Gordón advierte que las estaciones médicas son puntos para detectar pacientes sospechosos de covid-19.
El proceso incluye toma de signos vitales, preguntas de rigor para detectar si tuvo contacto con una persona positiva y un examen físico. De acuerdo con los datos recabados, el doctor define si es necesario realizar una prueba rápida.
Gordón aclara que en las carpas solo se realizan pruebas rápidas. “Si es que existen síntomas y un resultado positivo los referimos al CAT. Allí se confirmará el resultado con un hisopado o rayos X, según se requiera”. El miércoles solo en Quitumbe se realizaron
EL COMERCIO
MÁS SOBRE LA EMERGENCIA SANITARIA