La Policía recuperó cinco osamentas humanas que se encontraban en medio de la maleza del Bosque Protector Papagayo, en la parroquia Tarqui, al noroeste de Guayaquil.
Los restos fueron encontrados al medio día del martes 5 de noviembre de 2024, mientras militares realizaban un operativo contra asentamientos ilegales en el sector.
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El fuerte olor que se desprendía de alado de uno de los caminos de tercer orden llamó la atención de los uniformados, quienes decidieron indagar.
Al acercarse al punto, los miembros de las Fuerzas Armadas comprobaron la presencia de varios huesos que parecían ser restos humanos en descomposición.
El difícil acceso al lugar, debido a la vegetación crecida, obligó a que el retiro de las osamentas se ejecute a la mañana del día siguiente.
Los restos pertenecerían a cuatro hombres y una mujer
Cerca de las 09:00 de este miércoles, unidades especializadas de la Policía acudieron a tratar la alerta.
Luego de varias horas de trabajo, finalmente los gendarmes y un forense pudieron extraer los cadáveres en fundas especiales.
Los cuerpos fueron trasladados hacia una morgue de la ciudad, donde se les realizará los análisis e identificación respectiva.
De forma preliminar se presume que los cuerpos estuvieron más de 30 días en descomposición luego de ser arrojados desde la vía. Uno de los cinco cadáveres pertenecería a una mujer.
Bandas criminales se disputan el lugar
Además de las osamentas se encontraron varias prendas de vestir desgastadas por las condiciones ambientales, lo que presume que pudieron pertenecer a otras víctimas.
Este sector es conocido como el “canal de la muerte“, por los recurrentes cuerpos de víctimas de asesinatos que se hallan en este tramo de más de 40 kilómetros.
Al menos cuatro bandas criminales operan en este distrito, provocando una ola de violencia que va en aumento.
En lo que va del año se han reportado 134 asesinatos en este lugar del noroeste de Guayaquil.
