FARC culpó a gobierno de Uribe por retraso en liberación de rehenes
Bogotá, AFP
La guerrilla colombiana de las FARC responsabilizó el miércoles al gobierno de Álvaro Uribe por el retraso en las liberaciones de dos militares colombianos que mantienen como rehenes, según un comunicado divulgado por internet y firmado por la cúpula del grupo insurgente.
Tras reiterar su voluntad de liberar al cabo del Ejército Pablo Emilio Moncayo, del soldado Daniel Calvo y entregar los restos mortales del mayor (de la Policía) Julián Guevara, quien murió en cautiverio, las FARC dijeron: "es el gobierno quien ha introducido palos en la rueda (de las liberaciones)".
"Primero con los 'inamovibles' -demandas mínimas del gobierno- y ahora con nuevas, absurdas e inaceptables exigencias", enfatizaron las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en el comunicado publicado a través de la agencia Anncol, que divulga información del grupo.
Según los rebeldes, para liberar a los dos rehenes y entregar los restos de Guevara "tan solo hemos exigido que el gobierno otorgue y cumpla las mismas garantías ofrecidas en pasadas liberaciones unilaterales, para evitar que se repitan provocaciones como la sucedida en la anterior entrega de prisioneros".
"En el colmo del cinismo y de la insensibilidad clasista (el gobierno Uribe) pretenden culpar a las FARC cuando lo único que solicitamos es que vengan por sus prisioneros, a quienes ellos mandaron a la guerra y abandonaron luego que cayeron en desgracia, como consecuencia de la confrontación", añadieron.
"Cada día, cada hora que demore la liberación del cabo Moncayo y del soldado Calvo, es de exclusiva responsabilidad del gobierno de Uribe", puntualizó el comunicado rebelde.
En el pasado las FARC exigieron la presencia de la senadora opositora Piedad Córdoba para una anunciada liberación unilateral de los soldados Moncayo y Calvo, que integran un grupo de 24 uniformados mantenidos como rehenes.
Inicialmente Uribe se negó a dicha exigencia. Sin embargo, hace dos meses la aceptó, aunque afirmando que Córdoba debe realizar la gestión junto a la Iglesia católica y el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) , y con el compromiso de los guerrilleros de liberar a todos los rehenes.