Los vulcanólogos monitorean la actividad eruptiva del Cotopaxi, así como la emisión de gases del coloso. Foto: Pavel Calahorrano/ EL COMERCIO
Los técnicos del Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional de Ecuador evalúan los últimos datos para determinar si se mantiene alta la emisión de dióxido de azufre, un gas que está saliendo constantemente del volcán Cotopaxi, en los Andes centrales ecuatorianos.
En un último informe, emitido el 6 de julio del 2015, se indicó que hubo un incremento en los niveles de emisión de ese gas, porque se reportaron 4 640 toneladas frente al nivel normal, que es de 4 000 toneladas.
Según los especialistas, este martes 7 de julio efectúan el análisis del comportamiento registrado en las últimas 24 horas.
Benjamín Bernard, vulcanólogo de turno del Instituto Geofísico, explicó que el aumento de los gases no es un cambio drástico ni alarmante. Además, es uno de los parámetros que se toma en cuenta para analizar el comportamiento eruptivo del Cotopaxi.
Otros aspectos son la sismicidad, las fumarolas, la deformación del cráter, entre otros. Este día se analizará si sigue aumentando la salida de gases o baja. “Hay que estudiar la tendencia”, dice.
Esteban Hernández, técnico del Instituto Geofísico, explicó que el nuevo informe se tiene previsto emitirlo esta tarde. “Estamos haciendo el estudio sobre la actividad interna en el coloso. En el informe del lunes 6 de julio del 2015 se notó un incremento. Eso no significa que se mantenga igual”.
Aseguró que en la mañana se observó un penacho de vapor menor a 1 kilómetro de altura sobre el cráter. “La emisión de vapor no es nueva, este siempre se ha mantenido en el macizo hace varios días”.
Explicó que las emisiones de dióxido de azufre (SO2) subió de
2 500 a 4 640 toneladas al día, como la registrada el domingo 5 de julio del 2015. “Estamos monitoreando al volcán y todos los datos que se presentan los damos a conocer a las autoridades”.