Las poblaciones que están en la cuenca baja del Teaone como Chichivine, Morachigue y Carlos Concha, reportaron emergencia por inundaciones. Foto: Cortesía
Los ríos Teaone y Esmeraldas volvieron a desbordarse esta mañana luego de que la provincia soportara tres días intensos de lluvias. Los primeros efectos se sienten en las islas Luis Vargas Torres, Pianguapí, 50 Casas, Propia 1 y 2, donde el agua ha empezado a subir.
En la isla San Juan de la parroquia Majua, del cantón Esmeraldas, unas 1 500 personas pidieron esta mañana atención del Municipio de Esmeraldas y botes de la Armadas para evacuar por la subida del río.
Esa fue una las poblaciones más afectadas el pasado 25 de enero del 2016, cuando se desbordó el río Esmeraldas, conjuntamente con barrios como 50 Casas y barrios ribereños.
El responsable de la Secretaría de Gestión de Riesgos, Betto Estupiñán, dijo que el agua de los ríos va a subir porque ha llovido tres días y pidió tomar las previsiones.
En la isla Luis Vargas Torres se colocan muros de tierra para evitar que el agua entre por las partes más bajas. Las familias han salido de sus casas para estar pendientes, pese a que en Pianguapí hay más de 15 familias afectadas.
De acuerdo con la tabla de marea, la pleamar estará en su máxima expresión a las 18:00 de hoy, 11 de abril del 2016 y si continúa aumentando el caudal del río se pueden registrar nuevas inundaciones. “Los planes de mitigación deben activarse, ahora que estamos en alerta naranja”, señaló Estupiñán.
Las poblaciones que están en la cuenca baja del Teaone como Chichivine, Morachigue y Carlos Concha, reportaron emergencia por inundaciones y solicitaron personal para evacuar a familias afectadas por la crecida del Teaone.
Los equipos de respuesta del Municipio de Esmeraldas trabajar en algunos frentes como en las islas y en la vía Tabiazo-Carlos Concha, donde se registra un deslizamiento de tierra que incomunica parcialmente a poblaciones campesinas.
La red vial principal que comunica a Esmeraldas con la población de Quinindé presentaba siete deslizamientos de tierra. El paso está habilitado pero debe conducirse con cuidado por el colapso de una alcantarilla a la altura de Chaflú, que afecta la vía.