Pregón Estudiantil en el barrio Garay. Foto: Gabriel Proaño / EL COMERCIO
Los barrios tradicionales son una buena opción si usted quiere conocer a Guayaquil desde sus raíces. La ‘Perla del Pacífico’ es singularmente celebrada en los barrios de más de 50 años de existencia.
Don Miguel Luna, por ejemplo, descansa en una esquina de su natal barrio Cuba, ubicado al sur de Guayaquil y a orillas del Río Guayas. Cada noche desde de mayo se reúne con al menos cinco miembros del comité barrial con quienes organizan las actividades por las fiestas de Fundación de Guayaquil.
Hoy, sábado 25 de julio del 2015, en el barrio Cuba habrá torneo de indor, carreras de ensacados, concurso de bailes, de comelones, en donde los ganadores ganarán premios donados por la misma vecindad, y también por colaboradores que trabajan en las industrias que conforman gran parte de este tradicional barrio guayaquileño.
La música no faltará en el evento juliano. La realidad es que en este lugar nunca falta la melodía, “por eso es llamado Cuba”, dice Sonia Loreto, habitante del barrio desde hace 23 años. El origen del nombre, según datos de la Guía Histórica de Guayaquil, remonta a año 1929, cuando se dispuso una ordenanza municipal. El nombre ‘Cuba’ se llamó al tramo de la av. Eloy Alfaro desde la calle El Oro. La decisión fue dada como gratitud a La Habana, ya que en esa ciudad caribeña colocaron un monumento del general Eloy Alfaro.
Los moradores del barrio saben que las fiestas no se construyen solas. “Los habitantes somos unidos como pocos en la ciudad”, afirma don Miguel. Allí, las fiestas de Guayaquil coinciden con las fiestas patronales de Santiago Apostol, donde los fieles realizan actividades una semana atrás.
Al buscar fiestas populares, se podría llegar también al tradicional callejón 28 de Mayo, ubicado entre las calles Guaranda por el este, Pío Montúfar por el oeste, Francisco de Marcos al norte y Letamendi en el sur. El lugar queda muy cerca al estadio George Capwell, en el centro – sur de Guayaquil.
Las guirnaldas celeste y blanco unen las coloridas casas que conforman el callejón, donde su vecindad realza que allí se han grabado casi 25 filmaciones, entre comerciales y películas.
Doña Judith Morales dice que en su vivienda grabaron varias escenas de la película ecuatoriana ‘Sin Otoño, sin primavera’. Afirma sentirse orgullosa de ser parte del ‘guayaquileñismo’ que se respira al caminar. Es que el callejón 28 de Mayo conserva su originalidad. Las casas permanecen sin cerramiento, y con flores en los maceteros que adornan las ventanas.
Allí también la vecindad se reúne para organizar festejos. Por las fiestas de fundación de Guayaquil, esta tarde se realizará un torneo de indor y habrá música popular.
El barrio Garay, en el suroeste, es otro símbolo del nacimiento de los barrios de Guayaquil. En 1938, cuando se fundaron las primeras familias, el sector se llamaba San José. En ese entonces, diariamente se olía a leña. A orillas del Estero Salado, tradicionalmente se hacía el carbón tanto para cocinar como para venderlo en otros sitios del país.
Pero ya han pasado 77 años, y cada año la gente quiere festejar a Guayaquil desde el Barrio Garay. Xavier Zurita es el presidente del comité pro-mejoras del barrio. Desde el inicio del año escolar, Xavier se acerca hasta las instituciones educativas para invitarlas a participar en el desfile por las fiestas.
El pasado sábado, la actividad contó con cerca de 2 000 alumnos de 12 escuelas y colegios. Las banderas de Guayaquil no dejaron de flamear al son del paso que recorrió 11 manzanas. El recorrido empezó en las calles 10 de Agosto y la 11ava, y terminó en la calle Ismael Pérez Pazmiño.
Los movimientos del vestido blanco en las damas, y el sombrero de paja en los caballeros, alegraban las extensas columnas de asistentes que se emplazaron por toda la ruta del recorrido. Algunos pedían que nunca desaparezca la tradición; otros en cambio manifestaban que Guayaquil merece más eventos similares.
Se tiene previsto que en la tarde de hoy se realice un concurso de comida criolla. Xavier Zurita destaca que en cada evento organizado participa la ciudadanía joven y adulta; hombres y mujeres “madera de guerrero”.