Los alumnos de 36 centros educativos comenzaron a afinar sus instrumentos musicales. Ellos se alistan para el desfile del 12 de noviembre, fecha en la que Ambato cumplirá 193 años de Independencia.
Los patios, estadios y aulas de los colegios se convirtieron en sitios de concentración de los estudiantes para los repasos de las marchas.
El estridente sonido que emiten los instrumentos es audible en las calles y viviendas cercanas a los centros educativos.
En estos lugares, los jóvenes golpean con fuerza los tambores, bombos, liras, redoblantes, platillos y trompetas. Para dar más vistosidad y mejor sonido, cada año los maestros adoptan nuevos instrumentos musicales.
El Colegio Particular Shekiná introdujo en su banda de gala trompetas, saxos, flautas traversas. El pasado miércoles, los 80 integrantes de la agrupación musical se reunieron en el patio central.
Vestían pantalones de tela azul, camisa blanca y una chompa. El sonido agudo del tambor dio inició a los repasos. Los jóvenes con los timbales y liras acompañaron las melodías musicales. Con el movimiento sincronizado comenzaron a marchar en la pequeña cancha de cemento del colegio, ubicado en la ciudadela Miraflores.
Para Gioconda Gutiérrez, directora (e) de la institución, los chicos aprenden a entonar ritmos y marchas de tonos rápidos y alegres como Sublime Gracia, Cuan grande es El, Fanfarria latina…
La alumna Grace Viera, integrante de la banda, comentó que para la conmemoración de la ciudad se deben preparar con canciones rítmicas a pesar que los ambateños no aprecien esos temas.
“Con las melodías alegres los asistentes nos acompañaron con sus aplausos. Eso nos motiva. En nuestro repertorio no constan las marchas militares, porque promueven la violencia”, dijo Viera.
En el 2010, a través de un acuerdo ministerial, se dispuso que las bandas estudiantiles incorporen melodías que tengan que ver con la cultura del país y que dejen de lado la concepción militar que tuvieron inicialmente. Así, adoptaron el nombre de ‘banda rítmica, estudiantil, de paso o de gala’.
Para Marco Jiménez, instructor musical del Colegio Rumiñahui, un impulso por cambiar la denominación a las bandas militares o marciales fue la firma del tratado de paz definitivo entre Ecuador y Perú, en octubre del 2006.
Recordó que desde ese año, las autoridades del Ministerio de Educación iniciaron un trabajo para difundir el cambio de denominación a las agrupaciones.
Sin embargo, en la práctica se mantiene la interpretación de ritmos militares. “Esto se debe a que no se involucran nuevos instrumentos de viento. Tampoco hay instructores especializados”.
Con ese criterio coincidió el profesor de música José Lascano, maestro del Colegio Tirso de Molina, ubicado en la parroquia Izamba. Por ello, en el repertorio están canciones como: Altivo ambateño, Ambato tierra de flores, Paquisha y otras marchas. Los repasos de los 80 integrantes son de lunes a viernes, a las 14:00.
“Algunos compañeros de trabajo nos ayudan con los permisos de los estudiantes. Pero necesitamos el apoyo de las autoridades educativas para poder involucrar nuevos instrumentos”, contó Lascano.
Los datos del desfile
El desfile en Ambato iniciará en la avenida Unidad Nacional y continuará por la av. Cevallos hasta la calle Francisco Flor, ubicada en el centro de la urbe.
La tribuna de las autoridades eclesiásticas, militares y civiles se localizará en el remodelado parque Pedro Fermín Cevallos.
Los patrulleros de la Policía Nacional abrirán el desfile, seguidos por la Banda Municipal, autoridades locales y del país.