72% de donantes de sangre en Ecuador son voluntarios

En el banco de sangre de la Cruz Roja, en el parque La Alameda, se atiende desde las 08:30 hasta las 17:00. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO

La vida de Álvaro Escola cambió hace nueve meses, cuando a sus 21 años le detectaron anemia aplásica. Por la enfermedad acude cada dos semanas a recibir transfusiones sanguíneas; su organismo no produce suficientes glóbulos rojos.
Debilidad, dolores de cabeza y mareo fueron los síntomas que empezó a sentir antes de tener un diagnóstico. Ahora, cada dos semanas permanece en el Hospital Carlos Andrade Marín, del IESS, un día o más dependiendo de la situación. Debe evitar actividades físicas, exposición al sol y su alimentación es controlada.
La sangre nueva que ingresa a su cuerpo le permite sobrellevar su enfermedad. “Cuando recibo la transfusión me siento bien y sano, como si no tuviera nada”, relata.
Para él y para otros pacientes que requieren transfusiones por enfermedades crónicas o cirugías, la sangre es de vital importancia.
Este 14 de junio del 2018 se celebra el Día del Donante y para este año se lanzó una campaña mundial cuyo lema resalta la solidaridad. “Date a los demás. Dona sangre, comparte vida”.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el porcentaje mínimo de donantes en un país debiera alcanzar el 2% de su población, es decir una tasa de 20 donantes por cada 1 000 habitantes. Lo óptimo sería llegar al 5%. En Ecuador continúa el déficit. Hay 15 donantes por cada 1 000 personas (1,5% de la población).

Luisa Varela es la responsable del Programa Nacional de Sangre del Ministerio de Salud Pública (MSP). En el país, la mayoría, el 72%, acude a donar de forma voluntaria, mientras que el 28% lo hace para reponer los componentes sanguíneos usados por familiares o amigos en centros médicos.
Kelly Caisaguano integra el primer grupo. El lunes, 11 de junio, esperaba su turno en uno de los puntos fijos de donación de la Cruz Roja, en Quito. Lo primero que hizo fue llenar un formulario con datos personales como edad, peso, estatura. Aunque la sangre pasa por un proceso de validación le consultaron si tiene alguna enfermedad o si toma medicamentos. Desde el 2014, Kelly, de 21 años, acude a ese lugar dos veces al año.
En el país hay 18 bancos de sangre y un hemocentro, 14 bancos son privados y cuatro públicos, según el Ministerio.
La Cruz Roja Ecuatoriana es la proveedora del 70% de sangre en el país. La capital cuenta con siete puntos móviles y cuatro puntos fijos para la donación. El más grande, ubicado en el parque La Alameda, recolecta un promedio de 1 300 pintas mensuales.
Lo detalló Juan Carlos Ospina, responsable de donantes voluntarios, que son la mayoría. Él acude al lugar de 08:30 a 17:00, de lunes a viernes.
Otra es la historia en el banco de sangre del Andrade Marín. Al ser un hospital, el 80% de donación es compensatoria y el 20%, de voluntarios.
Según Mauricio Heredia, jefe de la unidad de banco de sangre del Andrade Marín, esa casa de salud realiza alrededor de 36 000 transfusiones de sangre por año. A diario, este banco recibe un promedio de 80 donantes. En el 2017 captaron un total de 23 912 donantes.
Heredia comenta que la sangre se utiliza para servicios de hematología, para pacientes oncológicos, para cirugías de alto riesgo como trasplantes, intervenciones cardíacas, terapia intensiva y neonatología.
En hematología, por ejemplo, se realizaron 8 703 transfusiones el año pasado Mientras que en terapia intensiva se realizaron 4 380 transfusiones. Estas dos áreas captan buena parte de su demanda.
Los esfuerzos sanitarios apuntan a generar una cultura de donación de sangre. Según el Ministerio, del 2015 al 2017 hubo 84 eventos de colecta. También 5 733 actividades de sensibilización, para la donación voluntaria.
Pero el temor o el desconocimiento aún son factores que limitan la donación altruista.
Subir o bajar de peso, contagiarse con una enfermedad o que una persona con tatuajes no puede donar son algunas de las creencias. Todos son mitos, reitera Ospina, que perjudican sus campañas persuasivas en sitios de alta concentración.
Las únicas restricciones son la edad y otras relacionadas con la salud. En general, se permite donar desde los 18 hasta los 65 años, siempre y cuando el peso sea adecuado. En mujeres, si no están embarazadas o en periodo de lactancia.
El tipo de sangre que más se dona en el país, según datos del Ministerio, es el ORH positivo. En tanto que, el más difícil de obtener es el ORH negativo. Quienes más sensibilizados están hacia la necesidad de dar vida tienen de 18 a 39 años, que concentran el 64% del total.