Viviana Bonilla presidió la sesión del Pleno este martes, 16 de octubre del 2018. Foto: Patricio Terán / EL COMERCIO
La entrega de la nacionalidad ecuatoriana al hacker australiano y fundador de WikiLeaks, Julian Assange, por parte del Gobierno, generó debate hoy, martes 16 de octubre del 2018, en el Pleno de la Asamblea Nacional.
Eso a pesar de que la asambleísta socialcristiana Paola Vintimilla retiró la propuesta de resolución que presentó hace dos semanas para que se desclasificara la información relacionada con el tema.
Vintimilla explicó que hoy, una hora antes de que sesionara el Pleno, recibió una comunicación en la que la Cancillería le aclara que la información sobre la naturalización de Assange no es reservada.
No obstante, la presidenta encargada Viviana Bonilla (exAP), dio paso a un debate en el que volvieron a aflorar las discrepancias entre legisladores de partidos de oposición, el oficialismo y los correístas.
Desde la bancada de Alianza PAIS, la coordinadora del bloque Ximena Peña, dijo que se alegraba que Vintimilla haya retirado su propuesta de resolución pero subrayó que la Asamblea “no tiene atribución para levantar la reserva a la información” de este tipo.
Pero desde el Bloque de Integración Nacional el coordinador René Yandún demandó que el Gobierno “diga la verdad al país” sobre el caso Assange. “¿Assange es ecuatoriano?¿es asilado?”, increpó.
La socialista Silvia Salgado, en cambio, consideró que el australiano cuenta con una “sobreprotección” que precautela su integridad.
Y los correístas como Juan Cárdenas y Gabriela Rivadeneira, en sus discursos, señalaron que la integridad de Assange está en riesgo por las revelaciones que hizo en WikiLeaks y que comprometen a los intereses de la primera potencia mundial.
La socialcristiana Cristina Reyes manifestó que es una “afrenta” las versiones de que Assange, a través de sus abogados, planee seguir un proceso judicial contra el canciller José Valencia.
A lo que se sumó María Mercedes Cuesta, quién remarcó que “Assange vive de nuestra plata” al estar refugiado desde hace 6 años en la Embajada de Ecuador en Londres.
La discusión se agotó al cabo de unos 40 minutos.