Redacción Judicial
‘No votes ni blanco ni negro, vota Rubio”. La frase de una empleada judicial fue un preludio de lo que ocurriría al final del día en la elección del presidente de la Federación Nacional de Asociaciones Judiciales del Ecuador (Fenaje).
La mujer, que prefirió no identificarse, se acercaba al oído de los funcionarios y repetía la frase, antes de que los sufragantes se dirijan a una de las urnas que se instaló en el auditorio del Palacio de Justicia de Pichincha.
Tras la jornada electoral, el candidato guayaquileño se llevó la victoria con 1 884 votos. Sacó una diferencia de 440 sufragios sobre su contendor, Fidel Chiriboga, titular de la Asociación de Judiciales de Pichincha.
En esta provincia, según el escrutinio hecho por el Consejo Nacional Electoral (CNE), Rubio obtuvo 446 votos. Chiriboga, en su reducto, solo logró 257. Rubio, sin embargo, no ganó en su distrito, Guayas. Allí, Chiriboga sacó 283 sufragios, frente a 223 que obtuvo el Juez Primero de lo Penal.
Pero Rubio fue el más votado en el resto de provincias de la Costa, en cinco de seis provincias de la Amazonia (excepto Pastaza), en Galápagos y en la Sierra en distritos como Carchi, Imbabura, Chimborazo, Bolívar, etc. Obtuvo el triunfo en 17 de 24 provincias.
Rubio y Chiriboga compiten desde 2008 por la Presidencia de la Fenaje, un puesto que dejó Luis Muñoz en 2007. Durante dos décadas, Muñoz fue el líder del gremio, por su gran convocatoria. Ahora él se encuentra en el exilio, por un juicio en su contra por la toma del edificio del Consejo Nacional de la Judicatura en Quito.
Luego de una polémica por escoger al sucesor (antes Rubio ganó a Chiriboga en 17 distritos, pero el proceso se anuló), se resolvió que todos los funcionarios judiciales, y no solo de los presidentes de las asociaciones a escala nacional, acudan a las urnas. Así, 3 737 servidores de la Función Judicial fueron ayer convocados por primera vez para elegir a su representante nacional.
En Quito se destinaron tres recintos electorales: en la Corte Nacional de Justicia, en el Consejo de la Judicatura y en el Palacio de Justicia. Allí debían votar 670 personas. En Guayas, hubo recintos en la Corte Provincial y en juzgados de Milagro, para receptar los votos de 600 empleados. En el resto del país se instalaron entre uno y dos recintos por provincia.
Según el delegado del CNE, Carlos Vega, el proceso electoral se organizó desde hace más de un mes. Se estableció un reglamento, con base en una propuesta que presentó el Consejo de la Judicatura. Además, se organizó el proceso con los consejos electorales provinciales y las delegaciones de la Judicatura en el país.
Ayer, en toda cartelera y ventana del Palacio de Justicia había carteles y afiches de las dos listas: la A era de Chiriboga y la B de Rubio. “Todo está bien organizado y no hemos tenido ningún problema en el desarrollo del proceso electoral”, dijo Vega.
Katiuska Alarcón, funcionaria del juzgado XII Penal de Pichincha y delegada de la lista A, aseguró que este es un proceso insólito porque se permitió el voto universal. “Estamos sufragando con total tranquilidad, sin presiones ni temores. No ha habido novedades”.
Punto de Vista
Benjamín Cevallos/ Presidente de la Judicatura
Antes había mucha discusión porque se pensaba que la Presidencia de la Fenaje era un cargo que tenía mucha influencia en la Función Judicial. Pero ahora será una función que solo se dedique al tema gremial, no a la política ni a actividades de otra naturaleza que no sea la defensa de los funcionarios judiciales.
La Fenaje es un organismo gremial y no político como era antes. Tampoco puede influir en las decisiones que tomen los judiciales.
Esta es la primera vez que se realizan elecciones universales y directas. Antes solo votaban ciertas personas de los distritos, pero esta vez se estableció un proceso más democrático, pues el candidato que pierda, así sea por un solo voto, deberá respetar la decisión que haya tomado la mayoría.
Pedí a los candidatos que se comprometan a respetar los resultados y aceptaron. Espero se cumpla por el bien de la familia judicial, que necesita fortalecerse y unirse bajo una sola bandera de lucha: el bienestar y la justicia. Yo cumplí mi parte como Presidente del Consejo de la Judicatura.