Fundada en 1989 y lanzada inicialmente en Estados Unidos para competir con marcas de la talla de Mercedes-Benz, BMW y las locales Lincoln y Cadillac, Infiniti ha experimentado un crecimiento significativo en los últimos 24 años.
La firma de lujo de Nissan actualmente tiene presencia en 50 países de Norte, Centro y Sudamérica, Europa, Asia y Australia, en los que ha ganado mucho prestigio gracias a la calidad de sus productos.
En el marco del evento denominado Nissan 360° llevado a cabo en California, EE. UU., Johan de Nysschen, vicepresidente global de la marca, explicó algunas de las claves que han dado a Infiniti el reconocimiento mundial del que ahora goza, así como algunos de los proyectos futuros.
Según de Nysschen, el éxito de Infiniti radica en la capacidad de cambiar la oferta tradicional del segmento premium, que ha sido una de las más conservadoras del mercado automotor.
El directivo explicó que es necesario ofrecer productos diferentes para convencer a los nuevos usuarios, ávidos de encontrar mucho más que lujo y altas prestaciones.
“Sin dejar de ofrecer lo mejor de la ingeniería, el diseño y la manufactura, Infiniti apela tanto a lo racional como a lo emocional. Es una marca cálida, tentadora y muy humana”, aseguró de Nysschen.
Añadió que la fidelidad de los clientes está estrechamente ligada a los elementos diferenciadores que esta les ofrece y que hace que la prefieran por sobre la oferta de la competencia.
Una muestra del compromiso de Infiniti con la atención a las cambiantes necesidades de sus clientes fue la exposición de los espectaculares prototipos deportivos Essence, Etherea y Emerg E, exhibidos junto a la presentación.
Según Shiro Nakamura, jefe creativo de Nissan, los vehículos incorporan las expectativas de los usuarios de la marca en cuanto a diseño y tecnología, por lo cual representan un anticipo de lo que Infiniti pudiera poner en el mercado en el futuro cercano.
“Infiniti ofrece lo mejor de la ingeniería, diseño y manufactura” Johann de Nysschen.