Investigadores analizaron las superficies de tres grandes aeropuertos de Estados Unidos y descubrieron cuáles son los rincones menos limpios. Foto: Wikicommons
No es extraño que luego de volver de unas vacaciones, las personas caigan enfermas, en especial si viajaron a un lugar frío y llegan a uno cálido, y transitaron por varios aeropuertos internacionales y en aviones atiborrados, donde los microbios abundan, y los gérmenes proliferan libremente entre tanto tráfico humano.
Según un reporte realizado por InsuranceQuotes.com, los lugares menos limpios de los aeropuertos son las máquinas de auto check-in -que hoy en día abundan en la mayoría de las terminales para agilizar el proceso-. Es más, según la investigación, aquí hay 200 veces más de gérmenes que en el asiento del inodoro de una casa.
Los investigadores llevaron a cabo 18 tests en seis superficies de tres grandes aeropuertos de Estados Unidos, y luego promediaron la cantidad de unidades formadoras de colonias (UFC) por cada pulgada cuadrada (6,4516 centímetros cuadrados). Según sus hallazgos, en promedio cada pantalla de check-in contenía 253 857 UFC por pulgada cuadrada.
La presencia de gérmenes no significa que necesariamente el pasajero se enfermará pero, para los que prefieren protegerse, se recomienda usar en gel antes y después de utilizar las máquinas de auto check-in y los otros sitios mencionados.
Por otro lado En el 2016, un estudio llevado a cabo por Travelmath reveló que los lugares más sucios de una nave son la hebilla del cinturón de seguridad, el botón de descarga del inodoro, las salidas de aire de cada asiento y, en primer lugar, la bandeja donde se come. Sin embargo, un nuevo informe se propuso ahora analizar cuál es el rincón más asqueroso del aeropuerto.
Estos objetos con los que los pasajeros se encuentran en constante contacto no se esterilizan lo suficiente debido a que las limpiezas entre vuelo y vuelo suelen ser cada vez más cortas para rebajar los costos y que el avión esté más tiempo en el aire. Sin embargo, el estudio de Travelmath demostró que en los baños se encontraron algunas de las superficies más limpias del avión, a pesar de la creencia popular, sin contar, por supuesto, el botón de descarga. Esto se debe a que debido a su uso continuo y a la cantidad de gérmenes que pasan por aquí, son los lugares esterilizados con mayor frecuencia en los aviones.
Pero estos monitores no son los únicos lugares infestados. Los apoyabrazos de los asientos donde se espera antes de embarcar y los botones de los bebederos se posicionaron en el segundo y en el tercer puesto respectivamente. Según los investigadores, estos sitios son más sucios que el lavabo de la cocina de una casa.