Durante el mes del orgullo, las calles de diversas ciudades se cubren con la bandera del arcoíris, símbolo creado a finales de los años 70 que representa a la comunidad LGBT. Foto: Galo Paguay/ EL COMERCIO.
Junio es el mes del orgullo LGBT y durante él, las calles de ciudades de todo el mundo se cubren de los colores de arcoíris para visibilizar a los gays, lesbianas, bisexuales, transexuales, intersexuales y más miembros de esta comunidad. ¿Alguna vez te has preguntado por qué los LGBT y sus aliados ondean la colorida bandera? En Afull te lo contamos.
En declaraciones para BBC Mundo, el activista de derechos humanos Peter Tatchell cuenta que el arcoíris “muestra el amplio espectro dentro de la comunidad LGBT, pero también refleja el espectro diverso más allá de ella”. Para él, este símbolo se ha vuelto “omnipresente” desde 1990.
La bandera de arcoíris alcanzó popularidad a nivel mundial desde 1990, pero fue creada por el artista Gilbert Baker en 1978. Foto: Archivo/ EL COMERCIO.
Pero la bandera de arcoíris está presente desde antes. De acuerdo con información difundida por el portal Huffington Post, fue creada en el año 1978 por el artista Gilbert Baker luego de que Harvey Milk, un reconocido activista de los derechos LGBT en Estados Unidos y el primer hombre abiertamente homosexual en ser elegido para un cargo público en el país norteamericano, se lo encargara.
“Milk presionó a Baker para que creara un símbolo reconocible de empoderamiento para la comunidad queer”, dice el Huffington Post. Sin embargo, según las memorias del artista difundidas en su sitio web, Baker se rehusaba a crear una bandera pues “”la veía como simplemente otro icono para satirizar. Había considerado que todo patriotismo de ondear una bandera en general como una broma peligrosa, pero eso cambió en 1976″.
Dos banderas de arcoíris desfilaron por las calles del Centro Histórico de Quito el pasado 30 de junio del 2018 cuando se realizó la marcha del orgullo LGBT en la capital ecuatoriana. Foto: Archivo/ EL COMERCIO.
Ese año, Estados Unidos celebró los 200 años de la adopción de la Declaración de la Independencia y todo giraba en torno a la bandera. “Estaba en todo lado, desde el arte pop hasta el arte fino, desde souvenirs de mal gusto hasta mala publicidad. En cualquier nivel, funcionaba como un mensaje“, recuerda el artista.
Esto le llevó a pensar de otra forma en las banderas “descubrí la profundidad de su poder, su trascendencia y calidad para transformar. Pensé en la conexión emocional que sostienen. Pensé en cómo la mayoría de banderas representaban un lugar”.
Pero eran los 70, todo era cuestionado y los gays eran “un colectivo global que se estaba expresando en el arte y en la política. Necesitábamos una bandera para ondear en todos lados”. Pues se vivía “una batalla por la igualdad de derechos, un cambio en el Estado en el que ahora exigíamos poder y lo tomábamos. Esta fue nuestra revolución, una visión tribal, individualista y colectiva. Se merecía un nuevo símbolo“.
El creador de la bandera de arcoíris que representa a la comunidad LGBT falleció en el año 2017. Un año antes, el símbolo fue colocado en el Museo de Arte Moderno de Nueva York. Foto: Archivo/ EL COMERCIO.
La inspiración para los colores le llegó al artista en medio de un baile al que asistió en el que resaltaban dos elementos: el color y la luz. “Era como un arcoíris”, escribió. “Ese fue el momento en el que supe exactamente qué tipo de bandera iba a hacer”.
A lo largo de la historia, el arcoíris ha sido visto como un símbolo de esperanza. “Una bandera de arcoíris sería nuestra alternativa moderna al triángulo rosa” dice, refiriéndose al símbolo que durante la Segunda Guerra Mundial sirvió para identificar a los homosexuales en los campos de concentración. La bandera se convirtió en un símbolo más positivo, algo para ondear con orgullo.
Así nació la bandera LGBT que originalmente tenía ocho colores, cada uno con un significado. El rosado, dice la BBC, representaba la sexualidad, el rojo la vida, el anaranjado la curación, el amarillo la luz del sol, el verde la naturaleza, el turquesa el arte, el índigo la armonía y el violeta el espíritu humano.
Originalmente, la bandera del orgullo LGBT tenía ocho colores. Actualmente se utilizan seis, aunque hay variaciones. Foto: Archivo/ EL COMERCIO.
El número de barras se redujo a seis posteriormente. El rosado y el índigo quedaron fuera y el azul reemplazó al turquesa. Graham Bartram, vexilólogo del Instituto de Banderas del Reino Unido, dijo a la BBC que esto sucedió porque “era difícil conseguir el material para el color rosado en ese momento, así que se descartó”. Agregó que en esos días uno tenía que coser las banderas a partir de materiales pre existentes en vez de imprimirlas, como se hace ahora”.
Baker murió a los 65 años el 31 de marzo del 2017 en Nueva York. Un año antes estuvo presente en el Museo de Arte Moderno de la ciudad (MOMA) cuando este incluyó su creación en su colección permanente.
El creador de la bandera de arcoíris no patentó su diseño pues quería que el símbolo le pertenezca a todo el mundo. Foto: Archivo/ EL COMERCIO.
El Huffington Post asegura que el artista “nunca se volvió millonario por su diseño, pero este ha sido utilizado desde su creación para simbolizar la solidaridad con los movimientos LGBT, no solo en Estados Unidos, sino en todo el mundo”.
El artista nunca puso una licencia de derechos de autor sobre su creación. Según su amigo Charles Beal, quien además administra los proyectos creativos de la fundación Gilbert Bake no lo hizo “porque quería que sea propiedad de todo el mundo”.