Lavado de manos y el distanciamiento social son las principales recomendaciones para evitar la propagación del covid-19. Foto: Archivo / EL COMERCIO
La mañana de este domingo 1 de noviembre de 2020 se observó moderada concurrencia a los centros comerciales de la ciudad. El estacionamiento de El Jardín lucía lleno en un 50%. A la entrada, los sistemas de control para la prevención del virus se han automatizado.
La temperatura se toma en una cabina y el gel fluye de un dispositivo sin contacto. En este centro comercial no había fila al ingreso del supermercado ubicado en el sitio, contrariamente a lo que suele ocurrir otros fines de semana. En el patio de comidas pocos degustaban los alimentos. En los pasillos y escaleras una veintena de personas cargaba sus compras. Yorbelis Izturis esperaba en una mesa y miraba su teléfono hasta que sus amigos lleguen para dar una vuelta. Quedaron en verse para pasear y almorzar.
Clara Ponce dice que acudió al lugar para dejar su ropa en la lavandería que funciona en el subsuelo del sitio. Mientras, en un local próximo los empleados de una barbería sentados esperaban por clientes. Carlos Dudamel explicó que suelen aparecer a medida que el día avanza. Asegura que ayer estuvo movida la jornada y que espera atender al menos 10 personas hoy hasta que caiga la noche. En el centro comercial, la gente ya no se guía por el sentido de las señales pintadas en el piso, eso sí todos llevan mascarilla y algunos un visor para protección adicional.
En el Quicentro, mientras tanto, la gente se concentraba en el patio de comidas. Los pasillos lucían vacíos. Teresa Torres, empleada de un almacén de artículos deportivos, esperaba a que llegara la gente. Contó que abrió y vendió un soporte para llevar bicicletas en el auto, pero que luego solo han aparecido personas para preguntar por otros artículos, no para comprar.
Carlos Terán hacía guardia en la puerta de una joyería del centro comercial. Dice que la tarde es más movida pero que no ve que haya tantos compradores como antes de la pandemia. Afirma que muchos van solo a mirar. Al supermercado del local cercano sí llegan personas a diario para abastecerse de artículos de primera necesidad.
En el Centro Comercial El Bosque, todos los asistentes parecían haberse concentrado en el supermercado del lugar. Una pequeña fila de cuatro personas esperaba para la desinfección y el gel que un guardia distribuye a la entrada. El parqueadero lucía lleno. Aracely Viteri dice que ha vuelto ahora que habilitaron las vallas y el ticket de ingreso y que así se siente más segura.