En el vibrante escenario gastronómico de Guayaquil, Josué Sánchez ha logrado destacarse con un plato único que fusiona lo mejor de la cocina china y ecuatoriana: el chop suey de cangrejo y camarón al ajillo. Este innovador platillo no solo refleja su pasión por los mariscos, sino también su capacidad para reinventar sabores tradicionales con un toque moderno y atrevido.
Más platos favoritos:
Una historia de creación en la cocina
Josué Sánchez, fundador del restaurante La Pata Gorda, recuerda cómo nació la idea de este peculiar chop suey en 2010, cuando estaba inmerso en la apertura de su local. En sus primeras semanas, pasaba largas horas en la cocina, experimentando con diferentes combinaciones de sabores, buscando algo que dejara una huella en el paladar de sus comensales.
“Todo empezó con mi amor por los cangrejos”, dice Sánchez. “Después de pasar horas martillando las tenazas para extraer la carne, comencé a mezclar el cangrejo con salsita criolla de la casa, maduro frito cortadito y una salsa especial. Al final, le añadí camarones al ajillo y esa combinación fue una revelación”.
A partir de ese momento, el chef supo que había creado algo único. Este chop suey, aunque comparte su nombre con un clásico plato chino, es un homenaje a los ingredientes frescos del mar y a la cocina costera ecuatoriana, adaptado al estilo personal de Sánchez.
El secreto detrás de los sabores
La base de este chop suey es el cangrejo, cuidadosamente preparado tras horas de cocción y desmenuzado a mano para garantizar una textura suave. “El cangrejo es el corazón del plato, pero la verdadera magia está en los acompañantes”, explica Sánchez. La salsa criolla, hecha con una mezcla de ajíes, cebolla y cilantro, aporta un sabor auténtico y fresco. El maduro frito, ligeramente dulce, contrasta a la perfección con el ajo de los camarones, creando una armonía de sabores que es irresistible.
Uno de los aspectos que distingue a este chop suey de otras versiones es la inclusión del camarón al ajillo. “El ajillo le da un toque robusto al plato. Los camarones se doran en aceite de oliva con ajo hasta que estén perfectamente cocidos, lo que potencia su sabor y les da una textura deliciosa”, dice el chef.
Además, la salsa de la casa, que es un secreto celosamente guardado, juega un papel crucial. Está hecha con ingredientes locales y tiene un sabor ligeramente ahumado que eleva cada bocado.
Innovación y tradición en un solo plato
Aunque el chop suey es originalmente un plato chino, la versión de Josué Sánchez ha sido adaptada a los sabores de Guayaquil. Su cocina está impregnada de las tradiciones costeras ecuatorianas, pero siempre busca sorprender a sus clientes con nuevas interpretaciones de los platos clásicos. “Al principio, la gente pensaba que era solo otro chop suey, pero cuando lo probaban, se daban cuenta de que era algo completamente diferente”, cuenta con una sonrisa.
Sánchez añade que uno de los ingredientes que más sorprendió a sus clientes fue el maduro frito. “Cuando le añadí maduro al plato, pensé que era arriesgado, pero la combinación de dulce y salado hizo que todo encajara. El maduro aporta una textura crujiente por fuera y suave por dentro que complementa perfectamente los mariscos”.
Un plato que ha conquistado corazones
Desde su creación, el chop suey de cangrejo y camarón al ajillo se ha convertido en uno de los platos más solicitados en La Pata Gorda. Visitantes de todas partes de Ecuador, e incluso de otros países, han acudido al restaurante para degustar este innovador platillo. “Es increíble ver cómo algo que comenzó como una simple idea se ha convertido en un plato que muchos consideran su favorito”, afirma Sánchez.
El chef también comenta que el chop suey ha evolucionado con el tiempo. “Siempre estoy buscando formas de mejorar el plato. A veces añado un toque extra de picante, o cambio ligeramente la receta de la salsa criolla. Es parte de mi filosofía de cocina: siempre buscar la perfección”.
¿Qué hace tan especial al chop suey de Josué Sánchez?
La respuesta radica en la mezcla de sabores y en la dedicación del chef a cada detalle. El uso de ingredientes frescos, locales y de alta calidad es fundamental. Sánchez insiste en que su cangrejo siempre proviene de las costas de Ecuador, y sus camarones son seleccionados a mano para asegurar que estén en su punto óptimo de frescura.
Además, su atención al proceso de preparación es lo que eleva este chop suey a otro nivel. “Cada paso en la cocina es importante”, dice. “Desde la elección de los ingredientes hasta la cocción de los mariscos, todo tiene que ser perfecto”.
¿Te gustaría saber más sobre platos favoritos de chefs?
Inscríbete para que recibas notificaciones y puedas vivir nuevas experiencias gastronómicas.