El cinturón de seguridad de cinco puntos es el primer paso. Empiezan los clic y las instrucciones técnicas. Líneas, colores, mapas e indicadores en varias pantallas. Botones y ‘swtiches’ al frente, abajo y en el techo. En la cabina de pilotaje, la concentración es clave desde que el vuelo toma pista en el aeropuerto Mariscal Sucre, de Quito, hasta los 10 000 pies.
Hasta sobrepasar esa altura no se puede interrumpir a la tripulación. Durante ese tiempo, al sitio desde donde se opera el vuelo se le llama cabina estéril. Gustavo Solano, primer oficial de Avianca, explica que únicamente él y el capitán de la aeronave pueden hablar durante ese lapso y solo lo hacen sobre cuestiones técnicas, referentes al vuelo.
Este miércoles 6 de abril del 2022, el tramo fue corto a bordo del AV646 de la aerolínea colombiana. En menos de dos horas, una nueva ruta une directamente a la capital ecuatoriana con San José de Costa Rica, ciudad centroamericana cálida, rodeada de montañas.
Dionisio Sotela, capitán del vuelo de Avianca, explicó que, durante la cabina estéril, la tripulación se encarga del encendido de motores y recibe instrucciones del ATD (hora real de salida, por sus siglas en inglés) para hacer el rodaje hacia la pista de despegue. Además deben cumplir con varios requisitos y estar atentos a los procedimientos necesarios en caso de presentarse alguna falla.
Programa de vuelo se modernizó
El capitán Sotela contó que hace alrededor de seis meses, el plan de vuelo -con el que hacen un doble chequeo de lo programado en el avión- pasó de anotaciones a mano, sobre papel, a una aplicación que usan en pantallas con las que cuentan en la cabina. Están a la izquierda del capitán y a la derecha del primer oficial.
Ahí ingresan datos como los tiempos de salida, entre ellos: la hora del ‘push-back’ (movimiento del avión desde la puerta de embarque hasta la calle de rodaje), hora de despegue o nivel de combustible. En esa misma pantalla se chequea que todo marche bien durante el vuelo, explicó el capitán.
Desde la cabina, la tripulación también visualiza los puntos de chequeo programados en la aplicación. Esto, ante posibles eventualidades por la falla de algún motor o por despresurización. De esa manera tienen establecido cuáles son los aeropuertos a los que deben dirigirse, de acuerdo con la ubicación del momento, señala el capitán.
Antes de la llegada, el capitán informó a los pasajeros del avión que había lluvia en San José y que esperarían autorización para aterrizar. Desde las alturas solo se veían nubes espesas y el agua que golpeaba las ventanas de la aeronave. La única referencia espacial -para el común de las personas- podría ser el mapa de la pantalla. La figura correspondiente al avión estaba sobre América Central, luego de haber empezado en Sudamérica y de atravesar luego el Océano Pacífico.
Sotela y Solano esperaron atentos a las indicaciones que escuchaban a través de sus audífonos para empezar el descenso. El vuelo, que salió de Quito cerca a las 14:35, aterrizó en el aeropuerto Juan Santamaría unos minutos antes de las 15:50 de Costa Rica (una hora menos que en Ecuador).