Imagen referencial. Según expertos, al viajar fuera de a ciudad se genera un ambiente de exposición al virus. Foto: Julio Estrella / EL COMERCIO
A partir del cambio de semáforo de rojo a amarillo es posible visitar otros cantones que tengan el mismo nivel de restricción. Aunque esto es factible, no es de ningún modo recomendable según expertos consultados.
Enrique Terán, médico e investigador de la Universidad San Francisco de Quito, recuerda que salir es exponerse inevitablemente. Añade que lo primero que uno tiene que recordar es que la semaforización es solo una alternativa al aislamiento completo, es un nivel de permisibilidad, pero esto no significa que la transmisibilidad del virus haya disminuido. Considera que movilizarse es romper la lógica del distanciamiento que se busca para evitar entrar en contacto con otras personas.
Terán remarca que nadie debería hacer microturismo en las actuales circunstancias. Las actividades turísticas implican interactuar con terceras personas. “No sabemos quién estuvo antes o quién va a estar en el sitio de destino, y siempre habrá el riesgo de encontrarse con personas que ocupan el lugar al que voy”. Si esto ocurre, el especialista recomienda ni siquiera bajarse del vehículo y regresar lo antes posible. Entonces la pregunta es: ¿para qué ir?
El experto sostiene que, aunque haya la intención de no acercarse a otra persona, se genera un ambiente de exposición, contrario al entorno de aislamiento que debe primar todavía. De igual manera, puntualiza que la mayor transmisibilidad por viajes, sean cercanos o no, puede provocar un rebrote de covid-19 porque habrá un mayor número de infectados. Basta con que alguien de un sitio infecte de tres a cinco personas de otro lugar para iniciar un rebrote de la enfermedad.
La recomendación de Terán es evitar ir a otro cantón, y si es un caso urgente, usar la mascarilla de forma permanente, lavarse las manos con frecuencia, mantener el distanciamiento, huir de las aglomeraciones y no tocarse ojos, nariz ni boca. Al mismo tiempo, alerta que la gente tiene que ser consciente de que la poliexposición al virus agrava la enfermedad. No es lo mismo estar expuesto a un solo virus que al mismo microorganismo que puede provenir de tres, cuatro o cinco personas.
Por su parte, el catedrático Fabricio González, especialista en genética médica y de poblaciones, considera que viajar es transportar el virus. Para él, el aislamiento social es cuestión de responsabilidad, de cuidarse uno mismo y a los demás. González afirma que hay que viajar únicamente por emergencia, porque cualquier persona puede ser portador asintomático del Sars-cov-2, se puede tenerlo y no manifestar síntomas pues se trata de un virus que es latente y contagioso.
González traza un itinerario para el virus. Dice que el contagio será primero en el transporte, si es público peor, y luego llegará al lugar de destino con el infectado. El especialista relata que se trataría del mismo escenario que ocurrió cuando llegó el primer caso de covid-19 al Ecuador, tendría el mismo efecto pero a nivel cantonal y por vía terrestre. Por eso, recomienda no salir, no dejar el cantón a menos que se trate de un asunto de supervivencia, o de una emergencia médica o legal. Fuera de ello, no hay razón para viajar.